En los aspectos concernientes a la delimitación marítima, asegura embajador Luis Solari Tudela

TLC con Chile presenta omisiones muy graves y delicadas para el Perú

Foxley trata de confundir a los peruanos

El embajador Luis Solari Tudela, ex vicecanciller, fue entrevistado por Con Nuestro Perú sobre el Acuerdo de Complementación Económica N.° 38 con Chile (de hecho un Tratado de Libre Comercio o TLC), donde advierte sobre aspectos muy graves para la demanda ante La Haya tras la vigencia del TLC con Chile.


—¿Qué aspectos son los más importantes en la extraña firma del TLC con Chile?

—Lo primero sobre el TLC con Chile es que recién ahora que está en vigencia se ha abierto el debate que el poder ejecutivo evitó por todos los medios. Ahora que el asunto está en debate en los medios, mediante declaraciones de políticos, congresistas o personas interesadas en el tema, la opinión pública se entera de varias cosas.

La primera de ellas es que hay una serie de disposiciones en el TLC que hacen que necesaria y obligatoriamente haya tenido que ser debatido y aprobado por el Congreso, cosa que el gobierno ha evitado a toda costa. Ahora sabemos por qué. Por ejemplo, las razones de seguridad nacional, que están establecidas claramente en el Capítulo III de la Constitución, como el Artículo 72.º, que dice: La ley puede, sólo por razón de seguridad nacional, establecer temporalmente restricciones y prohibiciones específicas para la adquisición, posesión, explotación y transferencia de determinados bienes.

Eso, por ejemplo, ha desaparecido, el TLC no lo considera, ahora sólo consideran necesidad pública.

La otra es la cuestión del territorio. Si bien, como ha dicho la ministra Mercedes Araoz, hay un artículo en el TLC que dice que el Tratado de 1929 prevalecerá sobre las cláusulas del TLC, eso elimina la posibilidad de que el territorio de Chile sea interpretado de acuerdo con la Ley de creación de la región de Arica-Parinacota, que señala que su territorio comienza en el hito 1, que ellos llaman erróneamente así al punto Concordia. Como prevalece el Tratado de 1929 y éste indica que el inicio de la frontera con Chile es el Punto Concordia, justo en la orilla del mar, entonces por allí no habría problema.

El problema radica en la cuestión del dominio marítimo. En el TLC creo que la traba está en que la descripción del territorio del Perú es un poco gaseosa, porque no se habla de espacio social y no se menciona las 200 millas, mientras que Chile en la cuestión del territorio sí coloca los artículos pertinentes de su constitución, pero nosotros no hacemos lo mismo.

—¿Cuál sería la explicación?

—La explicación podría ser que el territorio del Perú es bien claro cuando habla del dominio marítimo. El Estado ejerce soberanía y jurisdicción, sin perjuicio de las libertades de comunicación y todo lo demás. El dominio marítimo comprende el mar adyacente, sus cuencas, subsuelo hasta las 200 millas marítimas medidas desde las líneas de base que establece la ley.

Cuando se da la ley establece las líneas de base que cuentan las 200 millas según el derecho internacional, por ejemplo, en Arequipa, frente a Camaná, extendemos nuestro dominio marítimo hasta esa distancia que fija la Convención del Mar, y al extenderla así colisionamos con el “mar presencial” de Chile, que ese país ha reivindicado en la alta mar como su “mar presencial”, lo cual está prohibido por la Convención del Mar. Esa es la razón por la cual, creo yo, el Perú no coloca o no inserta en este TLC la descripción del territorio del Perú, como sería lo lógico, como lo hace Chile transcribiendo su artículo constitucional.

—¿Cuál sería la implicancia?
“...mucho me temo que incluso en este TLC haya intereses no de negocios con Chile, sino de negociados, eso explicaría muchas cosas...”


Creo que es otra omisión muy grave y muy delicada para el Perú, precisamente a días de presentarse la memoria ante La Haya.

Todas estas razones, además de que esta semana la ministra de Comercio Exterior en una entrevista televisiva en Canal N, dijo que hay un tema legal que cuando se implemente va a necesitar someterse una aprobación legislativa —creo que era en el tema de financiamiento— y que al aplicarse el TLC vamos a llegar a un momento en que se va a requerir la aprobación legislativa del TLC, pero que como por ahora como no hay esa situación, entonces no se requiere, sino que es simplemente un tratado ejecutivo, lo cual es un absurdo, eso no resiste ningún análisis.


—Primero dicen que no se requiere aprobación legislativa, ¿ahora dicen que sí?

—Si estos acuerdos necesitan aprobación legislativa, porque modifican la legislación y se enmarcan en el artículo 56 de la Constitución, no es posible que se sostenga con seriedad que esto es un acuerdo ejecutivo, esto es un acuerdo que requiere modificación legislativa, la misma ministra lo ha aceptado ayer y lamento mucho que el debate sobre esto se inicie, porque recién se ha iniciado el debate cuando el poder ejecutivo ha ordenado ya su ejecución, su vigencia.

—¿Cuál es la implicancia en la demanda ante La Haya?


—Esto hace el tema muy delicado, justo a días de presentarse la memoria ante La Haya. ¿Qué implicancias puede tener esto, puede disminuir, mermar nuestros argumentos ante La Haya?, ¿puede Chile utilizar esta posición tan débil del Perú en lo que se refiere a su soberanía marítima?, ¿puede Chile robustecer su contramemoria, que presentará después que se presente la memoria peruana? Son cosas que tenemos que examinar en la memoria peruana.

—¿Se debe tomar en cuenta el aspecto de la malicia de Chile, habida cuenta que cuando el Perú suscribió un tratado pesquero con Chile en 1954 ahora ellos lo transformen en tratado de límites?

—En realidad ya tenemos la experiencia de que el tratado pesquero ahora Chile lo quiere hacer funcionar como tratado de límites, entonces, con esa experiencia tenemos que ser muy cuidadosos.

—¿Qué se puede hacer o no hacer?

—Es algo complicado, quizás podría ser un comunicado del gobierno diciendo que ninguna de las disposiciones de este TLC pueden ser consideradas como un menoscabo de nuestra soberanía sobre las 200 millas a partir de nuestras líneas de base.

Por otro lado, la cuestión terrestre al menos está cubierta con ese artículo 19 que dice que las cláusulas del Tratado de 1929 prevalecen sobre el TLC.

Acá hay un gran problema constitucional, que va a traer muchas discordias y malos entendidos a los ya existentes.

—La firma secreta y veloz del TLC sólo a tres semanas de asumir el poder Alan García, siendo que un tratado de esta magnitud requiere gran análisis y un equipo amplio de abogados.; y teniendo en cuenta que este TLC y ciertas normas favorecen la inversión extranjera, en particular la chilena, además de la avalancha de más de 100 decretos legislativos que ni siquiera los equipos de asesores del Congreso se daban abasto para analizar a tiempo, ¿podría significar que grandes equipos legales chilenos estarían entregando y entregando normas legales a su conveniencia, confiados en que el poder ejecutivo las aprobará? ¿Cómo se explica que se produzcan tantas normas sin que se vean cuáles son los abogados? En una oportunidad, por ejemplo, Rafael Rey decía que no le interesa quién pagó por un proyecto de ley.

—En Chile el lugar que ha tenido este gobierno desde que se inició ha sido la corrupción, mucho me temo que incluso en este TLC haya intereses no de negocios con Chile, sino de negociados, eso explicaría muchas cosas, por ejemplo, ya no en el TLC con Chile, sino que el accionar del gobierno como es sindicado muchas veces.

Hace unos días una periodista extranjera me preguntaba por análisis internacionales y razones geopolíticas. Pienso más bien, con mucha vergüenza como peruano, que la mayoría de las acciones que se ejecutan en el gobierno tienen como base la corrupción, que sería lo que impulsó la venta del ministerio de Educación a un precio vil, las 60 hectáreas vendidas en La Molina a la sexta parte de su precio, la venta de los terrenos de Colllique a 28 dólares cuando cuesta cerca de 300 el metro cuadrado, precisamente a una empresa chilena. La corrupción sería la estrella la que anima a estas acciones más que razones geopolíticas.

—La estrella de cinco puntas... Qué podría decir sobre las declaraciones del canciller chileno Alejandro Foxley, quien insultó a los políticos peruanos que se oponen al TLC con Chile?

—Están tratando de confundir a la opinión pública nacional, porque cuando dicen que estamos anclados en el siglo XIX, eso no es cierto. Claro que tenemos el recuerdo de la Guerra con Chile, pero tenemos el recuerdo mucho más reciente, hace 13 años, cuando Chile, siendo garante del Protocolo de Río de Janeiro, vendió armas a Ecuador en pleno conflicto de 1996, para la guerra del Cenepa donde murieron más de 500 peruanos. Que no trate de hacer creer a los peruanos que éstas son las reminiscencias de la guerra de 1879, estas son las reminiscencias ¡recientes! de una actitud pérfida de parte de Chile contra el Perú.