El fracaso de las semillas transgénicas
Fernando Alvarado de la Fuente
El debate generado sobre el inminente ingreso de semillas transgénicos al Perú está dando por sentadas las mentiras de los súbditos de MONSANTO: “las semillas transgénicas producen más”. Los estudios demuestran que producen menos (de 5 a 10 % menos en relación a la soya convencional y de 2 a 8% menos en relación al maíz convencional), además de generar mayores gastos y dependencia del agricultor. Veamos ahora algunos casos del algodón.
En la Revista N.o 40-41 del Grupo Semillas de Colombia encontramos el artículo: "El fracaso del algodón transgénico en Colombia". El artículo concluye: “Luego de siete años de haber sido liberadas comercialmente las semillas de algodón transgénico, queda en evidencia el fracaso que han tenido. No cumplieron con las promesas de ser más productivas, ni de reducir el uso de pesticidas y herbicidas, ni de disminuir los costos de producción, ni de generar mayor rentabilidad para los agricultores. La tecnología transgénica la presentó Monsanto como la redención del sector algodonero; en realidad ha ayudado a llevar a los agricultores al fondo del abismo especialmente a los pequeños y medianos algodoneros de Córdoba y Tolima, quienes en la cosecha 2008–2009 tuvieron enormes pérdidas”.
Continua “Las empresas biotecnológicas en alianza con el ICA han promovido al unísono esta tecnología y han convencido a muchos agricultores de que estos cultivos son el desarrollo y que las semillas no transgénicas son el atraso. Pero sobre todo han logrado que las empresas transnacionales controlen el paquete tecnológico en su conjunto, incluyendo las semillas que están disponibles en el mercado, dejando a los agricultores atados a los monopolios.”
Finalisa “Pero a los pequeños agricultores les ha ido mal, debido a que estas semillas no están diseñadas para sus condiciones ambientales y socioeconómicas y sus parcelas tienen severas limitaciones productivas, tecnológicas y económicas.”
Ahora veamos la situación en China. Una nota de la BBC Mundo dice: “Según una investigación de la Universidad Cornell de Estados Unidos —llevada a cabo en China— el algodón Bt cayó víctima de otros tipos de gusanos, lo cual ha llevado a los cultivadores de la planta a usar pesticidas, casi en la misma cantidad que antes.”
Al principio todo bien…
“En China, el mayor productor mundial, más de cinco millones de personas cultivan esta variedad de algodón y ahora están usando pesticidas casi en la misma proporción que para variedades tradicionales. En China, las cosechas del tipo genéticamente modificado al principio dieron resultados positivos, según indica el estudio.
Los investigadores encontraron que al tercer año de estar cultivando el Bt los algodoneros chinos estaban usando un 70% menos de pesticidas y sus ingresos eran un 35% más alto que del de aquellos que cultivaban del algodón tradicional.”
Pero con el tiempo….
“Pero resulta que si bien el Bt había sido diseñado para defenderse del gusano rosado y del gusano bellotero, no se había previsto que pudiera caer presa de otras plagas. Al cabo de siete años, los científicos se dieron cuenta que otros insectos habían hecho su aparición y que los agricultores habían empezado a fumigar los cultivos hasta 20 veces durante la estación.”
“Pero más aún, sus ingresos son ahora cerca de un 10% menos de lo que gana un cultivador de algodón tradicional. El precio de la semilla del Bt es tres veces más alto que la del algodón tradicional, lo cual llevará a cuestionamientos adicionales sobre la viabilidad de esta opción.”
Igual fracaso tiene el maíz transgénico que quieren introducir en la costa peruana a pesar que produce menos que el convencional. Recomendamos ver el reporte Failure to Yield (Doug Gurian-Sherman, 2009), publicado por la Unión de Científicos Preocupados. Su original, en idioma inglés, está disponible en:
http://www.ucsusa.org/assets/documents/food_and_agriculture/failure-to-yield.pdf
Centro IDEAS – RAE Perú