Ollanta Humala, líder del Partido Nacionalista, oficiailzó, junto con sus congresistas, un pedido de vacancia del presidente Alan García por incapacidad moral permanente, como respuesta a las matanzas producidas Bagua, Chala y otros lugares.


Ante las declaraciones aprista que habían señalado que pedir la vacancia presidencial es antidemocrático o que va contra el estado de derecho o el orden constitucional, Humala recordó que en la Constitución Política del Perú está contemplada dicha vacancia por incapacidad moral permanente y que se trata de una consecuencia jurídica por la salud de la República, que implica la defensa de la vida.

Recordó que el aprismo pidió la vacancia del presidente Alejandro Toledo por no reconocer a una hija y agregó que las muertes causadas son un hecho es mucho más grave. La incapacidad moral permanente de García se evidencia en su “incapacidad moral” para resolver los conflictos sociales en el país, que ya causaron la muerte de unos 70 peruanos, sentenció.

Contra la toma de carreteras


Precisó que su partido contra la toma de carreteras y está a favor de la formalización de la minería artesanal y saben que existe una minería salvaje con explotación de niños y trata de blancas, pero esa situación, que tiene más de 30 años, no se puede resolver de improviso con un decreto de urgencia y sin diálogo.

Dijo que sobre todo para su partido está el derecho a la vida, lo cual no es la prioridad de García pues actúa de manera sistemática priorizando la defensa de intereses económicos de grupos cercanos al Presidente de la República y no priorizando el derecho a la vida.

Iban a pedir la vacancia desde los sucesos de Bagua

Manifestó que tras la masacre de Bagua su bancada iba a solicitar la vacancia presidencial por incapacidad moral permanente, pero ante la salida de todo el gabinete creyeron que el gobierno cambiaría, lo cual no ha sucedido, sino que se ha criminalizado la protesta y la represión del gobierno ha causado más de 70 muertos, más de 600 heridos y mas de 1300 procesos penales por protestas en las calles.

Humala aseguró que el problema no es del gabinete, aunque tenga responsabilidad, pues es un problema más profundo, es cómo García conceptualiza al Perú y sus políticas, donde el respeto a la vida no es su primera prioridad.

Complicidad de políticos
¿Cuántos muertos tiene que haber para que la sociedad peruana y la clase política asuman una actitud no de complicidad sino de rechazo?, preguntó y advirtió que la historia los juzgará y llamó a los políticos a rechazar las políticas de matanza y que peruanos sean velados en la carretera.

“No debemos ser cómplices de un Presidente que no esta sano moralmente, queremos trazar una raya de los que defienden al Perú y los que prefieren coludirse con los grupos de poder o con la corrupción”, indicó.

Habiendo crisis moral, la clase política debe dar señales de capacidad de indignación, señaló y pidió a los congresistas decentes que la historia les pedirá cuentas de lo que hicieron cuando sus representantes fueron asesinados, y que por eso sienten el deber moral de presentar la moción patriota de decencia por el derecho fundamental y absoluto de la vida.

Criticó a los políticos que van con almanaques y dádivas a los pobres para traficar con sus ilusiones y cuando llegan al Congreso “se venden por un plato de lentejas” y agregó que es el momento de que el Congreso se dignifique y que no son dignos de llamarse congresistas porque se coluden con el poder. “Necesitamos dignificar las instituciones, fortalecer la República, nadie está por encima de la ley y el primer ciudadano que debe dar el ejemplo es el Presidente de la República”, puntualizó y descartó que el pedido de vacancia responda a oportunismo electoral.

En opinión de diversos políticos, es poco probable que la moción nacionalista de vacancia obtenga mayoría en el Congreso.