Los pobladores detallaron que el desalojo dispuesto mediante la Ordenanza 1020 de la Municipalidad de Lima, que califica la zona de alto riesgo, es para dar paso a la construcción de una nueva Vía Expresa.
Pidieron modificar la referida ordenanza, respeto a la propiedad privada e implementar de forma alternativa un plan de desarrollo urbano de la zona mediante la creación de una Autoridad que administre Lima – Cercado.
Aducen que según informe del Instituto Geofísico del Perú la zona soportaría un sismo superior a los 7 grados por lo tanto no se encuentran en riesgo.
Expresaron que a la fecha está pendiente de resolución un pedido presentado ante el Tribunal Constitucional, por lo cual consideran que no se puede ejecutar en el lugar obra alguna para dar paso a la nueva Vía Expresa.