Una vez más los sufridos asegurados a Essalud sufren con el cáncer de la corrupción, pues cada gobierno de turno tomó a esta institución como botín para colocar a sus favoritos y perpetrar faenones. Ahora se investiga a la gestión de Fiorella Molinelli, colocada por el expresidente Pedro Pablo Kuczinsky y mantenida allí por los expresidentes Martín Vizcarra y Francisco Sagasti, pese a sus antecedentes en el escándalo Kuntur Wasi en perjuicio del Perú. Por el contrario, parece que sabía mucho por eso no se deshacían de ella.
La investigación fiscal que se sigue a la Molinelli apunta a que es cabecilla de una organización criminal que ha lucrado con las adquisiciones para Essalud por más de 28 millones de soles, y unos seis audios que mencionan a “la tía”, señalarían a que ella es Fiorella Molinelli, según hipotetiza la Fiscalía, informa el portal Convoca.
El festín normal que por décadas se perpetra en Essalud habría crecido con los ingentes millones destinados a la pandemia del COVID-19, pues por la situación de calamidad se obviaron trámites burocráticos para realizar compras directas.
El Poder Judicial, a través del juez Walther Huayllani, del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria Especializado en Delitos de Corrupción de Funcionarios y Crimen Organizado de Lima, ha valorado de forma positiva el planteamiento fiscal, por lo cual autorizó allanar el domicilio de la jefe de Essalud y otras 13 personas entre funcionarios y proveedores.
Las escuchas legales en las cuales mencionan a “la tía” corresponden a proveedores de Essalud que hablan entre ellos y apuntan a coordinaciones de “la tía” con funcionarios de esa institución y personas externas, con el fin de favorecer a ciertas empresas en la compra de bienes por más de 28 millones de soles, durante la emergencia sanitaria por el COVID-19, según la Fiscalía Anticorrupción.
Molinelli es acusada de liderar la organización criminal “El club de las famacéuticas”, conformada por otros seis funcionarios de EsSalud y terceras personas, con quienes coordinaba para maquillar como legales a irregulares adquisiciones.
La investigación comprende tres contrataciones directas de 2020: la compra de 449,918 lentes contra salpicaduras, por 9 millones 673 mil 237 soles; tomógrafos por 13 millones 380 mil soles; y otra compra de lentes de seguridad contra salpicaduras por 5 millones 940 mil soles.
Los presuntamente beneficiados de forma ilícita son ldos proveedores, Importadores Vía Ayaychan SAC y Tecnología Nacional e Industrial S.A. (TECNASA).
Habrían actuado de intermediarios entre las empresas proveedoras y los funcionarios de Essalud Fernando Obregón Mansilla (pereció durante la investigación) y Manuel Luis Altamirano Ramírez. En seis audios mencionan a la Molinelli como “la tía”.
Los audios
El 20 de agosto de 2020, los proveedores Fernando Obregón Mansilla y Manuel Luis Altamirano Ramírez conversan sobre el personal que labora en los almacenes del SALOG-ESSALUD, para internar los lentes protectores sin el previo control o supervisión y sobre las previsiones que tomarán ante la anulación de la entrega de los lentes protectores. La Fiscalía advierte que Altamirano le habría comunicado de este problema a Molinell (páginas 23 y 24 de la resolución judicial de 100 hojas).
El 16 de agosto de 2020, Manuel Luis Altamirano Ramírez, en el caso de los tomógrafos, dice a Fernando Obregón Mansilla que se había comunicado con “la tía”, quien le habría indicado que iba a anular la convocatoria y compraría al mismo proveedor del Ministerio de Salud ya no seis sino 12 tomógrafos. Agrega que ella le envió un informe del cual ya tenía conocimiento y no se encontraba completo. "(...) me acaba de contestar “la tía”, on, me dice que..., ahí te voy a reenviar, le han dicho que han reunido cinco expertos el viernes y le han dicho que no, que eso está sobrevalorado en un millón 200 mil”, dice. (Página 34 de la resolución judicial).
El 18 de agosto de 2020, Manuel Luis Altamirano Ramírez le dice a Fernando Obregón Mansilla: “"Mira, ayer “la tía” me dijo ya, el que ha movido esto es Bobadilla, yo pensaba que era la jefa de Marcos y no es así". Altamirano hace alusión a que la tía le habría informado que Juan José Bobadilla Aguilar, gerente de proyectos de inversión de EsSalud, era quien habría advertido esta presunta sobrevaloración. Según la Fiscalía, Molinelli tendría vinculación directa con Altamirano, quien sería proveedor de EsSalud y tendría diversos contratos con esa entidad. (Página 36 de la resolución judicial).
La Molinelli habría conspirado con proveedores para retirar a trabajadores que cuestionaron las compras
El 25 de agosto de 2020, Manuel Luis Altamirano Ramírez dice a Fernando Obregón Mansilla “(...) Ya, lo otro, escúchame, me acaba de escribir FIORELLA on, ta que me pide el sustento pa cagarlo a Bobadilla, te acuerdas que tú lo tenías (...)”. Por ello, la Fiscalía deduce que Molinelli también tenía interés en sacar a Bobadilla por cuestionar el proceso de contratación de los tomógrafos, para que puedan continuar manejando los procesos de selección en EsSalud. (Página 38 de la resolución judicial).
El 30 de agosto de 2020 Fernando Obregón Mansilla coordina con Manuel Luis Altamirano Ramírez para seguir beneficiando a la empresa TECNASA y le manifiesta sus dudas sobre los pagos: “Pero y si LA TÍA no, no paga”. (Página 41 de la resolución judicial)
El 30 de agosto de 2020, Fernando Obregón Mansilla comenta a Manuel Luis Altamirano Ramírez. Fernando: “Con esta publicación les vas a dar tranquilidad a LA TÍA, porque LA TÍA va a decir aquí no hay nada que temer”. También conversan sobre el valor referencial de los lentes protectores contra salpicaduras, evidenciando una coordinación o concertación entre los representantes de la empresa y funcionarios de EsSalud, según la Fiscalía. (Página 51 de la resolución judicial)
La pena por el delito de organización criminal es no menor de 15 años ni mayor de 20 años, para el líder o dirigente, según el Código Penal.
Fiorella Molinelli es acusada del delito de colusión o negociación incompatible y considerada por la Fiscalía líder de la organización criminal porque, en el cargo de presidente de EsSalud, se encargaba de organizar la entidad y aprobar las contrataciones. Ella aprovechó el estado de emergencia sanitaria por el COVID-19, aprobó contrataciones directas y avaló irregularidades en complicidad con seis funcionarios ubicados en puestos clave de EsSalud, que actuaban como ejecutores, y con siete personas ajenas a la administración y proveedores, que actuaban como intermediarios.