“Soy trabajadora. A mí la plata no me llega sola”. “Soy honesta, tengo las manos limpias. Yo no tengo compromisos con ninguno de los políticos, ni hago arreglos bajo la mesa…”, decía Susana Villarán y desde que era candidata ya se sabía de su falta de honestidad.
Ahora José Domingo Pérez, fiscal del equipo especial Lava Jato, presentó la acusación contra la exalcaldesa de Lima Susana Villarán y pidió que cumpla 29 años de cárcel porque habría recibido más de US$10 millones en sobornos de los ladrones brasileños de Odebrecht para ser favorecidos en contratos para obtener ganancias de saqueo en obras lesivas a los intereses de Lima.
Villarán está denunciada por el Ministerio Público por un concurso de delitos, entre ellos asociación para delinquir, colusión, lavado de activos, falsedad genérica y falsa declaración en procedimiento administrativo.
“La Fiscalía solicitó contra Villarán una pena de 29 años de pena privativa de la libertad, por la presunta conformación de una organización criminal que recibió más de US$10 millones en aportes ilegales de las constructoras Odebrecht y OAS para continuar al mando del municipio”, escribió en su cuenta Twitter el Ministerio Público.
En calidad de coacusados figuran José Miguel Castro, Domingo Arzubialde, Gabriel Prado y otros involucrados y exfuncionarios de la Municipalidad de Lima, para quienes el fiscal José Domingo Pérez solicita penas de 9 a 25 años de prisión efectiva.
Por ahora, Villarán goza de prisión preventiva en la modalidad de arresto domiciliario con el pretexto de ser vulnerable por la pandemia, lo cual a estas alturas es una burla, puesto que hay vacunas y la variante Ómicron causa casos leves, por lo cual resulta extraño que ella y Keiko Fujimori hayan gozado de este privilegio en mayo de 2020 mientras que otros presos permanecen en la cárcel.
En 2021 el Poder Judicial no quiso ampliar el arresto domiciliario y le impuso comparecencia con restricciones e impedimento de salida del país mientras continúen las investigaciones.
A inicios de mayo, el expresidente de OAS, José Adelmário Pinheiro Filho, quien se acogió a la figura de colaboración eficaz, reveló a los fiscales peruanos Carlos Puma y Germán Juárez Atoche que Susana Villarán “le agradeció el aporte” de US$ 3 millones para su campaña del No a la Revocatoria.
Dichas declaraciones con corroboradas por el exsuperintendente de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, quien dijo que Villarán lo había llamado de manera personal para agradecerle por los US$ 3 millones entregados para esos fines.
El pago a OAS se realizó a pedido del exgerente municipal, José Miguel Castro Gutiérrez, en una reunión en la que también participó Villarán, donde Pinheiro manifestó su interés en el proyecto Vía Parque Rímac.
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