El Congreso de la República aprobó declarar la vacancia al cargo de la presidencia del Congreso, tras el escándalo originado por el audio que la muestra sometiéndose a los mandatos del dueño del partido Alianza Para el Progreso, César Acuña, para utilizar la mesa directiva del poder legislativo para sus ambiciones electorales.
En la grabación se escucha a Acuña ordenar a Camones priorizar la ley que declara la creación del distrito de Alto Trujillo porque eso lo favorecerá en su candidatura al Gobierno Regional de La Libertad, orden que recibe Camones sin cuestionarlo.
Pese a lo grave del asunto, pues se configuraría un concurso de delitos, no fue unánime la censura contra Camones, que se aprobó con 61 votos a favor, 47 en contra y 5 abstenciones. Es decir, tenemos 52 congresistas a los que les parece aceptable la conducta de Camones, quien sin ningún rubor por el escándalo dijo tener la frente en alto por estos hechos.
Antes del debate, el Pleno del Congreso admitió por 64 votos a favor, 42 en contra y 1 abstención la admisión a debate de una Moción de Censura presentada por el congresista Guillermo Bermejo Rojas (PD), que fue suscrita por legisladores de otras Bandas Políticas.
La sustentación de dicha moción, estuvo a cargo de la legisladora Ruth Luque Ibarra (CD), quien refirió que en los audios se escucha al presidente del partido político Alianza Para el progreso (APP), César Acuña, que se le beneficie a través del Parlamento con la aprobación de un proyecto de ley que abonará a su candidatura como presidente regional.
“Ante estos graves hechos, y como lo dijimos antes de la elección de la actual Mesa Directiva que la presidencia del Congreso debe recaer en una persona que represente la pluralidad política de los 130 congresistas, y esto es lo que busca esta interpelación que exista la pluralidad política y democrática. El congreso no puede responder a determinados partidos políticos y sus intereses, requerimos de un correcto funcionamiento de nuestra institución”, consideró la legisladora Ruth Luque.
También refirió que estos hechos suman cada día más el desprestigio del Congreso, y que se habría tergiversado el cargo de representación política que tienen la presidenta del Parlamento.
Luego de la sustentación el parlamentario Eduardo Salhuana Cavides (APP), señaló que no hubo actos irregulares y que se deberían precisar lo que se señala. “Fue un acto privado, el Congreso no solo está representado por APP, es una moción que carece de sustento y tiene motivación política y fáctica”, manifestó.
Su colega Patricia Juárez Gallegos (FP), señaló que en este hecho hay un aprovechamiento político de parte del Consejo de Ministros, y que el Congreso es garantía de gobernabilidad y democracia.
Edwin Martínez Talavera (AP), refirió que la censura no tiene sustento alguno y que proviene de quienes quieren perpetuarse en el poder. “La presidenta no ha faltado al reglamento del Congreso y no ha cometido delito alguno”, refirió.