Durante los últimos nueve años el Grupo Basadre ha advertido a la Nación sobre la necesidad de actuar con mucha cautela en nuestras relaciones con Chile, señalando claramente las razones de nuestra desconfianza.
No obstante a la buena fe de varios gobiernos peruanos y el deseo colectivo de buena vecindad de nuestra clase política y de nuestra población, Chile continúa manteniendo una serie de prácticas inamistosas que nos impiden alcanzar una relación de mutuo respeto y con futuro que nos permita una real integración bilateral y multilateral.
Saludamos la decidida reacción de nuestra Cancillería y esperamos que el gobierno chileno tenga una respuesta que nos permita vislumbrar un cambio de actitudes acorde con el respeto a nuestra soberanía e independencia.
Chile debe dejar de lado su doble comportamiento que incluye una permanente amenaza militar debido a un irracional armamentismo; y, el afán expansionista cuestionando nuestra integridad territorial como al tratar de mantener heridas abiertas desconociendo el Tratado de Límites de 1929 que fijó de manera definitiva nuestras fronteras terrestres.
Perú y Chile deben superar sus históricas desavenencias y cambiar hacia una integración de esfuerzos recíprocos y equitativos.
Los peruanos debemos estar unidos y exigir a nuestros gobernantes más firmeza y cautela en nuestras relaciones con Chile mientras continúen las acciones perniciosas de sus redes de espionaje. También corresponde aplicar sanciones ejemplares a quienes traicionen a la Patria.
Febrero 26, 2015.
El Consejo Directivo