Autoridades policiales investigan la repentina muerte del cantante
Tras el súbito infarto que arrancó la vida al cantante Michael Jackson, la policía investiga las causas de su deceso acaecido en su residencia.
La investigación busca esclarecer las hechos de la muerte, para lo cual se trabaja con varias hipótesis, entre ellas, la de una sobredosis de pastillas.
Según el abogado de la familia Jackson, Brian Oxman, el hecho del consumo excesivo de medicamentos causaba preocupación.
Todavía no se conocen los resultados de la autopsia, pero las presunciones conducen al exceso de fármacos como la causa del fallecimiento.
Pese a los continuos escándalos, incluyendo las acusaciones de pederastia, por las cuales se vio obligado a silenciar las denuncias por más de 20 millones de dólares, sus fanáticos todavía aparecieron cerca de su residencia y del centro médico a donde fue conducido de emergencia.
Finalmente, el cadáver fue trasladado en un helicóptero hacia la morgue local.
Entre otros escándalos, sobre el cantante pesaron las acusaciones de falsedad, por haber inventado la enfermedad de vitiligo para enmascarar un misterioso procedimiento por el cual consiguió cambiar el color de su piel.
Desde niño, formando el grupo de los Jackson Five, el cantante destacó con su aspecto negro, pero en la adultez su obsesión por apartarse de sus orígenes negros y ser blanco (tal vez arrastrado por la obsesión por el aspecto físico que domina en EE. UU.), además del aclarado de la piel, a incontables cirugías de rostro, para adelgazar su nariz, modificar su mentón, ojos y adoptar una faz feminoide.
Otro hecho que acaparó titulares fue el vientre de alquiler que por el cual pagó para concebir un hijo con una mujer blanca, de lo cual tuvo un hijo, que hoy tiene siete años y es el menor de dos hermanos mayores nacidos de su segunda esposa, Debbie Rowe, con quien se casó después de divorciarse de la hija de Elvis Presley.