Danza "La Diablada" es patrimonio cultural del antiplano
En dicho evento se logro demostrar la peruanidad de la danza, que se originó en el altiplano, cuando toda esta región formaba parte del territorio peruano. Así mismo, precisaron que la danza forma parte de las festividades en honor a la Virgen de la Candelaria, la que fue declarada patrimonio cultural de la Nación en virtud de la RD 655/INC, emitida el 2 de septiembre de 2003, la cual abarca la festividad religiosa, sus imágenes, expresiones culturales y danzas que se presentan en ese marco.
La Diablada (danza) es un elemento del patrimonio cultural inmaterial y no implica el reconocimiento de una titularidad exclusiva. De ahí que la danza, sus atuendos y símbolos pueden y son utilizados con todo derecho por un ciudadano peruano en cualquier actividad pública o privada.
Cenzano Sierralta hizo un llamado a las autoridades de ambos países para que asuman este tema con mesura y potencien la identidad compartida, para que sirva como un factor de unidad entre dos naciones, en lugar de ser motivo de división.
Concluida la rueda de prensa, los conferencistas y los familiares de la Miss Perú Universo, además de otros invitados, bailaron La Diablada y diversas danzas puneñas, en el frontis del Palacio Legislativo, interpretadas por el Taller de Danzas de ‘Brisas del Titicaca’ y la Banda de Músicos de Unicachi.
Cabe resaltar que nuestra Miss Perú Universo 2009, llevara como traje típico a "La Diablada" danza altiplanica. El vestuario de La Diablada es muy lujoso y lleva bordados de oro, plata y pedrerías. Destacan los Caporales con vestuarios que llegan a pesar hasta 30 kilos.
LA DIABLADA
La diablada evoca sus antecedentes más remotos a los “Autos Sacramentales”, (representaciones teatral religiosas, practicados desde fines del siglo XVI en Juli - Puno. Los misioneros centraron su labor en el COLLAO, alentando sin querer, el” trasfondo religioso y filosófico del indígena, distorsionando, como es equiparar los espíritus y dioses del pateon americano, pero el impacto fue diferente, el indígena NO repudia al SUPAY (DIABLO en QUECHUA), más bien lo venera por temor.
Su asociación con el culto a la Virgen: Candelaria(PUNO). Surge a raíz de Leyendas populares y a la redención de los mineros entre los siglos XVII y XVIII.
La Diablada es una danza mestiza que exhibe los elementos de la religiosidad autóctona y cristiana. Se caracteriza por un propio simbolismo donde varia la música y el baile, los danzarines impetuosos, recuerdan como los mineros exclamaban la llegada del Diablo en las Minas de Laykacota, una de las más ricas en Latino América en su tiempo según el Virrey Conde de Lemus, éste a su llegada a San Luís de Alba (antiguo Puno), vio la escenificación de la lucha del bien y del mal (la Diablada Puneña); esta tuvo muchos cambios desde esas fechas, cambios como las máscaras que en su tiempo eran de yeso y para los cabellos eran utilizados los hilos de los costales de bayeta de la época; todo era tradicional y pequeño, se danzaba en fechas importantes para la Iglesia Catolica.
El conjunto “AUTENTICA DIABLADA DE PUNO”, fue creado en 1892 en el Barrio Mañazo, los cuales bailaban en el día central de la fiesta de la virgen de la candelaria, la cual dura 18 días, festividad con danzas pre colombinas y del folfklore colonial peruano que también se llaman “TRAJE DE LUCES”
La Diablada Puneña comenzó su cambio con la veneración de la Virgen de la Candelaria, Patrona de la Sociedad Puneña, es allí donde comenzaron a nacer conjuntos o agrupaciones de danzarines, que se agruparon por barrios como por ejemplo: el Barrio Bellavista, danzaron y estilizaron su traje hasta encontrar un evento tan magnánimo para la veneración a la Virgencita Candelaria, la parada de veneración y el Concurso de Danzas Autóctonas y de Trajes de Luces. Desde entonces nació el popular baile que según afirman muchos cronistas fue creado por un grupo de sacerdotes para dar catequesis a los indígenas de la zona altiplánica. La diablada representa el sincretismo que busca unir dos culturas distintas, en este caso la indígena con la española. Se mezclan los ritmos y la cosmovisión andina del mundo. En la colonia, cuando todo aquel que no fuese católico era sentenciado a la hoguera, la diablada dejó de practicarse sin que los españoles pudiesen entender el aspecto filosófico de la danza.
Después de la independencia, la diablada renació como un acto de los pobladores dedicados al ganado y a explotar las minas. Ahora es el acto central de las festividades que se realizan cada febrero en el festival de la Virgen de la Candelaria, conocida en el mundo andino como Mama Pacha, en el cual se hace un pago a la tierra.
La Diablada (danza) es un elemento del patrimonio cultural inmaterial y no implica el reconocimiento de una titularidad exclusiva. De ahí que la danza, sus atuendos y símbolos pueden y son utilizados con todo derecho por un ciudadano peruano en cualquier actividad pública o privada.
Cenzano Sierralta hizo un llamado a las autoridades de ambos países para que asuman este tema con mesura y potencien la identidad compartida, para que sirva como un factor de unidad entre dos naciones, en lugar de ser motivo de división.
Concluida la rueda de prensa, los conferencistas y los familiares de la Miss Perú Universo, además de otros invitados, bailaron La Diablada y diversas danzas puneñas, en el frontis del Palacio Legislativo, interpretadas por el Taller de Danzas de ‘Brisas del Titicaca’ y la Banda de Músicos de Unicachi.
Cabe resaltar que nuestra Miss Perú Universo 2009, llevara como traje típico a "La Diablada" danza altiplanica. El vestuario de La Diablada es muy lujoso y lleva bordados de oro, plata y pedrerías. Destacan los Caporales con vestuarios que llegan a pesar hasta 30 kilos.
LA DIABLADA
La diablada evoca sus antecedentes más remotos a los “Autos Sacramentales”, (representaciones teatral religiosas, practicados desde fines del siglo XVI en Juli - Puno. Los misioneros centraron su labor en el COLLAO, alentando sin querer, el” trasfondo religioso y filosófico del indígena, distorsionando, como es equiparar los espíritus y dioses del pateon americano, pero el impacto fue diferente, el indígena NO repudia al SUPAY (DIABLO en QUECHUA), más bien lo venera por temor.
Su asociación con el culto a la Virgen: Candelaria(PUNO). Surge a raíz de Leyendas populares y a la redención de los mineros entre los siglos XVII y XVIII.
La Diablada es una danza mestiza que exhibe los elementos de la religiosidad autóctona y cristiana. Se caracteriza por un propio simbolismo donde varia la música y el baile, los danzarines impetuosos, recuerdan como los mineros exclamaban la llegada del Diablo en las Minas de Laykacota, una de las más ricas en Latino América en su tiempo según el Virrey Conde de Lemus, éste a su llegada a San Luís de Alba (antiguo Puno), vio la escenificación de la lucha del bien y del mal (la Diablada Puneña); esta tuvo muchos cambios desde esas fechas, cambios como las máscaras que en su tiempo eran de yeso y para los cabellos eran utilizados los hilos de los costales de bayeta de la época; todo era tradicional y pequeño, se danzaba en fechas importantes para la Iglesia Catolica.
El conjunto “AUTENTICA DIABLADA DE PUNO”, fue creado en 1892 en el Barrio Mañazo, los cuales bailaban en el día central de la fiesta de la virgen de la candelaria, la cual dura 18 días, festividad con danzas pre colombinas y del folfklore colonial peruano que también se llaman “TRAJE DE LUCES”
La Diablada Puneña comenzó su cambio con la veneración de la Virgen de la Candelaria, Patrona de la Sociedad Puneña, es allí donde comenzaron a nacer conjuntos o agrupaciones de danzarines, que se agruparon por barrios como por ejemplo: el Barrio Bellavista, danzaron y estilizaron su traje hasta encontrar un evento tan magnánimo para la veneración a la Virgencita Candelaria, la parada de veneración y el Concurso de Danzas Autóctonas y de Trajes de Luces. Desde entonces nació el popular baile que según afirman muchos cronistas fue creado por un grupo de sacerdotes para dar catequesis a los indígenas de la zona altiplánica. La diablada representa el sincretismo que busca unir dos culturas distintas, en este caso la indígena con la española. Se mezclan los ritmos y la cosmovisión andina del mundo. En la colonia, cuando todo aquel que no fuese católico era sentenciado a la hoguera, la diablada dejó de practicarse sin que los españoles pudiesen entender el aspecto filosófico de la danza.
Después de la independencia, la diablada renació como un acto de los pobladores dedicados al ganado y a explotar las minas. Ahora es el acto central de las festividades que se realizan cada febrero en el festival de la Virgen de la Candelaria, conocida en el mundo andino como Mama Pacha, en el cual se hace un pago a la tierra.