Canciller mequetrefe!
Menos de una semana atrás la Universidad Católica, o algún grupo dentro de ella, se encargó, con bombos y platillos de organizar un “homenaje” al sujeto del cual se trató la columna aparecida en el diario Liberación nueve años atrás y cuando era dirigido por César Hildebrandt. “Tomar a lo serio cosas del Perú” denunciaba Manuel González Prada. Leamos esas líneas que aún tienen modesta vigencia pionera.
Liberación 8-11-2000
¡Canciller mequetrefe!
El oficial de la Orden de Malta, organización prima hermana del Opus Dei y por desgracia canciller del Perú, Fernando de Trazegnies, ha proferido un par de expresiones que le pintan de cuerpo entero. Dice que no entiende el levantamiento del teniente coronel Ollanta Humala y afirma que la salida de Fujimori provocaría el caos en el Perú. ¿En qué mundo vive este imbécil? ¡Pero si el país es un terrible mare magnum por causa de los robos e innúmeras fechorías de Fujimori y su socio delincuencial Vladimiro Montesinos! ¿O es que acaso cree este tipejo que todos somos cretinos o débiles mentales como él? ¡Vaya insolencia! ¡Qué desparpajo!
Si Fujimori no se va de Palacio es porque está dando tiempo a sus abogados y cómplices administrativos para que arreglen documentos, maquillen cuentas y borren las huellas de sus tropelías y las de sus demás compinches. ¿Alguien cree en su sano juicio que a Montesinos no le pueden echar el guante en 5 ó 10 minutos? ¡NO! Lo que ocurre es que ese caco sabe mucho y está "negociando" con Fujimori cómo salir con el menor daño posible de los fétidos menjunjes de diez años continuos de robos y crímenes.
Resulta que el hijo del ex-general Mercado Jarrín, antiguo jefe de Montesinos, un hombre muy vinculado a Indecopi y sus cazas de brujas, es socio nada menos que del procurador encargado de la investigación sobre Vladimiro, José Ugaz Sánchez Moreno y pareciera que el gato está de despensero porque si esto es absolutamente exacto ¿qué justicia podría aplicar quien tiene trabazones más bien cuestionables? ¿No es esto parte de la aplicación poderosa de la influencia de Montesinos? ¡Hablemos claro, señores y señoras, aquí manda un rufián y ese tipejo tiene extorsionados a los grandes señorones del gobierno, del Congreso, de la industria y de la política del país y no conviene que lo capturen y sí, más bien, que sea víctima de un infarto calibre 38!
¿Por causa de qué tenemos que soportar la iniquidad de un lenguaraz como de Trazegnies? Este sujeto no entiende nada que no sea el patrón monetario que pague sus servicios, siempre de espaldas al humilde o al que menos tiene. Su trabajo es sucio y maloliente, porque pretende dar visos de intelectualidad a lo que es un gobierno canceroso por inmoral y ladrón. Pero, al igual que Tudela, de Trazegnies no quiere darse por enterado y alienta una distancia más bien ficticia de lo que son los grotescos enjuagues y escándalos en que está envuelto el régimen.
Las maniobras de distracción de la dictadura incluyen a la mesa dialoguera con la participación vergonzante y proditora de los políticos y de los peleles de la llamada "sociedad civil", porque eso les provee de tiempo, el necesario para eliminar los resabios de sus trayectorias delictivas. ¡Qué país el nuestro que tiene que soportar que los que están en la cosa pública sean compañeros de ruta de una estafa política y antipopular como la que vivimos en el Perú! El Congreso es otro recinto prescindible por inútil y porque está infestado de alimañas vivíparas. ¡Qué disparate creer que en sus confines se piensa por el Perú o por su pueblo! ¡Allí sólo se cocinan las próximas listas de aspirantes o candidatos! ¿Y el pueblo? ¡Que se joda!
Necesitamos fortalecer las protestas militantes en plazas y calles, en colegios y universidades, en cuarteles y comisarías, en juzgados e iglesias. Tenemos que fusilar a través del Paredón Moral a pobres diablos como éste Trazegnies, anti cholo y miserable que se burla de la inteligencia de los hombres y mujeres del Perú. ¿Qué podría entender del alma popular un sujeto que jamás ha compartido los estadios humildes y sufridos de un pueblo como el nuestro? ¿No es su destino, acaso, el olvido más piadoso de su gestión como "canciller"?
Seamos dignos y firmes. No permitamos que esta conmoción enmohezca nuestros cerebros y expulsemos a las ratas de las calles y enjaulemos a estos epígonos de la anti-patria.¡De Trazegnies es un símbolo de la pobredumbre y de la indignidad! ¡Muerte a la dictadura! ¡Avanzar sin transar, es el grito popular!
¡Canciller mequetrefe!
El oficial de la Orden de Malta, organización prima hermana del Opus Dei y por desgracia canciller del Perú, Fernando de Trazegnies, ha proferido un par de expresiones que le pintan de cuerpo entero. Dice que no entiende el levantamiento del teniente coronel Ollanta Humala y afirma que la salida de Fujimori provocaría el caos en el Perú. ¿En qué mundo vive este imbécil? ¡Pero si el país es un terrible mare magnum por causa de los robos e innúmeras fechorías de Fujimori y su socio delincuencial Vladimiro Montesinos! ¿O es que acaso cree este tipejo que todos somos cretinos o débiles mentales como él? ¡Vaya insolencia! ¡Qué desparpajo!
Si Fujimori no se va de Palacio es porque está dando tiempo a sus abogados y cómplices administrativos para que arreglen documentos, maquillen cuentas y borren las huellas de sus tropelías y las de sus demás compinches. ¿Alguien cree en su sano juicio que a Montesinos no le pueden echar el guante en 5 ó 10 minutos? ¡NO! Lo que ocurre es que ese caco sabe mucho y está "negociando" con Fujimori cómo salir con el menor daño posible de los fétidos menjunjes de diez años continuos de robos y crímenes.
Resulta que el hijo del ex-general Mercado Jarrín, antiguo jefe de Montesinos, un hombre muy vinculado a Indecopi y sus cazas de brujas, es socio nada menos que del procurador encargado de la investigación sobre Vladimiro, José Ugaz Sánchez Moreno y pareciera que el gato está de despensero porque si esto es absolutamente exacto ¿qué justicia podría aplicar quien tiene trabazones más bien cuestionables? ¿No es esto parte de la aplicación poderosa de la influencia de Montesinos? ¡Hablemos claro, señores y señoras, aquí manda un rufián y ese tipejo tiene extorsionados a los grandes señorones del gobierno, del Congreso, de la industria y de la política del país y no conviene que lo capturen y sí, más bien, que sea víctima de un infarto calibre 38!
¿Por causa de qué tenemos que soportar la iniquidad de un lenguaraz como de Trazegnies? Este sujeto no entiende nada que no sea el patrón monetario que pague sus servicios, siempre de espaldas al humilde o al que menos tiene. Su trabajo es sucio y maloliente, porque pretende dar visos de intelectualidad a lo que es un gobierno canceroso por inmoral y ladrón. Pero, al igual que Tudela, de Trazegnies no quiere darse por enterado y alienta una distancia más bien ficticia de lo que son los grotescos enjuagues y escándalos en que está envuelto el régimen.
Las maniobras de distracción de la dictadura incluyen a la mesa dialoguera con la participación vergonzante y proditora de los políticos y de los peleles de la llamada "sociedad civil", porque eso les provee de tiempo, el necesario para eliminar los resabios de sus trayectorias delictivas. ¡Qué país el nuestro que tiene que soportar que los que están en la cosa pública sean compañeros de ruta de una estafa política y antipopular como la que vivimos en el Perú! El Congreso es otro recinto prescindible por inútil y porque está infestado de alimañas vivíparas. ¡Qué disparate creer que en sus confines se piensa por el Perú o por su pueblo! ¡Allí sólo se cocinan las próximas listas de aspirantes o candidatos! ¿Y el pueblo? ¡Que se joda!
Necesitamos fortalecer las protestas militantes en plazas y calles, en colegios y universidades, en cuarteles y comisarías, en juzgados e iglesias. Tenemos que fusilar a través del Paredón Moral a pobres diablos como éste Trazegnies, anti cholo y miserable que se burla de la inteligencia de los hombres y mujeres del Perú. ¿Qué podría entender del alma popular un sujeto que jamás ha compartido los estadios humildes y sufridos de un pueblo como el nuestro? ¿No es su destino, acaso, el olvido más piadoso de su gestión como "canciller"?
Seamos dignos y firmes. No permitamos que esta conmoción enmohezca nuestros cerebros y expulsemos a las ratas de las calles y enjaulemos a estos epígonos de la anti-patria.¡De Trazegnies es un símbolo de la pobredumbre y de la indignidad! ¡Muerte a la dictadura! ¡Avanzar sin transar, es el grito popular!