Los restos fósiles de un cetáceo prehistórico, el más pesado que ha habitado el planeta, fueron hallados en el desierto de Ica por el investigador Mario Urbina del Museo de Historia Natural de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM).
Se trata de Perucetus colossus “el coloso cetáceo del Perú”, denominado así en honor a nuestro país, cuyos restos fueron descubiertos en rocas de 39 millones de años, en el desierto de Ica.
Su peso estimado en 199 toneladas de peso, distribuidas en un cuerpo de unos 20 metros de longitud, lo convierte en el animal más pesado que ha existido en la Tierra.
Mario Urbina había descubierto en 2013 las primeras vértebras del gigantesco animal, mientras trabajaba por la zona de Samaca en busca de restos de cetáceos primitivos. Posteriormente, reunió a varios científicos para que identifiquen el extraordinario fósil, que actualmente consta de 13 vértebras y cuatro costillas; así como una parte de la pelvis.
Es preciso mencionar que los huesos se encuentran sumamente modificados con relación a otros animales debido a que adquirieron una enorme densidad y un volumen descomunal.
Por lo descrito, este nuevo hallazgo del paleontólogo Mario Urbina sería uno de los más valiosos e importantes del mundo, por lo que se publicará en la prestigiosa revista Nature.
El equipo de colecta de vértebras para estudio estuvo conformado por Walter Aguirre, Alfredo Martínez, Beder Martínez, Eusebio Díaz, Joan Chauca, entre otros. En tanto que la conservación de los huesos del Perucetus estuvo a cargo del especialista Walter Aguirre.
Todos ellos son miembros del Departamento de Paleontología de Vertebrados del Museo de Historia Natural de la UNMSM. El equipo contó, además, con la colaboración de científicos de universidades de Italia, Francia, Alemania, Países Bajos, Bélgica y de Suiza.
El fósil fue presentado a los medios de prensa nacional y extranjera el miércoles 2 de agosto, en la sede del museo sanmarquino ubicada en la avenida Arenales 1256, en el distrito de Jesús María.