Centros de rescate piden apoyo con urgencia. “Si nos dejan ahora, estos animales por los que tanto hemos luchado morirán”, señala Gudrum Sperrer, responsable del centro de rescate Pilpintuwasi, que alberga a más de 90 animales silvestres de distintas especies, rescatados del tráfico de fauna, entre ellos un jaguar.
Por Angela Rodriguez
Decenas de animales que fueron víctimas del tráfico de fauna silvestre y que hoy viven en centros de rescate, también están sufriendo el impacto indirecto del coronavirus. Desde que inició la cuarentena obligatoria, estos lugares han dejado de percibir ingresos económicos a través de los visitantes y ello ha puesto en riesgo la alimentación y la salud de la fauna que, en muchos casos, está recuperándose antes de regresar a su hábitat.
Gilberto Guerra y Gudrum Sperrer, responsables de los centros de rescate La Isla de los Monos y Pilpintuwasi, señalan que el dinero recaudado por las visitas es el principal sustento económico que tienen y ahora viven en la incertidumbre.
“El gran problema que tenemos no solo en Pilpintuwasi, si no en todos los centros de rescate ahora, es que, desde la cuarentena, es decir hace 5 semanas, no tenemos nada de entrada. Porque la mayoría de nosotros nos financiamos con la visita de turistas y de colegios”, indica Gudrum Sperrer, una austriaca cuyo amor por los animales la llevó a fundar Pilpintuwasi, a orillas del río Nanay en Loreto.
Gilberto Guerra, fundador y responsable de La Isla de los monos, comparte la preocupación de Gudrum. “Estamos tratando de que no les falte nada, por el momento. Pero no sé qué va a ser de nosotros”, comenta preocupado.
“Ellos también nos necesitan”, a través de las cuentas bancarias administradas por Profonanpe: en soles 191-98302549-0-02 (Banco de Crédito del Perú – BCP) y en dólares 191-98302554-1-07 (Banco de Crédito del Perú – BCP). |
La situación de estos dos lugares es casi la misma que sufren en estos momentos los centros de rescate y de cría que existen en el país. Estos espacios funcionan gracias al trabajo y compromiso de sus fundadores, personas que decidieron dedicar sus vidas a la protección y recuperación de animales rescatados del tráfico de fauna, pero se sostienen con el dinero que viene de los visitantes.
Gudrum fundó Pilpintuwasi como un mariposario, inicialmente, a mediados de 1995. Con el tiempo, empezó a recibir a animales como monos y perezosos rescatados. Motivada por su amor hacia la fauna silvestre, decidió convertir el mariposario en un Centro de rescate, invirtiendo incluso su propio dinero para acondicionar este espacio para la comodidad y bienestar de los más de 90 animales que hoy viven aquí: más de 56 monos de 11 tipos de especies, 2 tigrillos, guacamayos, osos, tapires, un coatí e incluso un otorongo.
“En Pilpintuwasi la gente entra prácticamente en una jaula, todo el camino es cubierto por una malla olímpica, para que de esa manera más animales puedan estar sueltos. La gente aquí no puede interactuar con ellos, acá no permitimos que agarren a los animales porque son animales silvestres, no mascotas”, explica.
Hoy, sin muchas opciones, Gudrum pide al Gobierno apoyo para mantener sanos y salvos a los animales a su cargo. “Nosotros, los de los centros de rescate, no somos dueños de los animales, nosotros solo estamos encargados y todos estamos hacemos un gran esfuerzo para mantener, para rehabilitar y darles una buena calidad de vida a estos animales y no recibimos ningún apoyo del Estado. Estos animales que tiene el Perú hay que conservarlos. Nosotros estamos haciendo un gran esfuerzo, así que agradeceríamos mucho el apoyo”, manifiesta.
También exhorta a las personas que estén en condiciones de apoyar que lo hagan. “Si alguien tiene la posibilidad de ayudarnos, estaríamos muy agradecidos porque además la labor que hacemos es para todos. Entiendo que hay gente que también dice ‘¿cómo se les ocurre pedir algo para los animales cuando hay gente que no tiene que comer?’. Yo entiendo ese pensamiento, pero también hay que tener presente que estos animales que están acá con nosotros no están porque han querido, lastimosamente están acá por culpa de los humanos y no sería justo que ahora nos olvidemos de ellos”, agrega.
Ayuda para la isla
La Isla de los Monos, ubicada en el Amazonas a 30 kilómetros de Iquitos, es, como su mismo nombre lo dice, una isla poblada por decenas de monos. Esto se logró gracias al trabajo de Gilberto Guerra, quien empezó el proyecto en 1997, luego de conocer la realidad de los animales extraídos de sus hábitats tan solo para atraer a los visitantes. Como guía turístico, conoció esta realidad de cerca y ello lo motivó a fundar el centro de rescate.
“Esto fue creado con la intención de proteger y salvar a tantos animalitos que han sido sacados de la selva por el tráfico de fauna”, nos cuenta y agrega que “este trabajo no es para tener dinero. La satisfacción de ver cómo un monito que llega en malas condiciones se recupera, es hermoso”.
Este centro, al igual muchos otros en Perú, tiene como único ingreso económico lo percibido por el cobro de entrada a turistas, lo cual permite costear la alimentación, medicinas y cuidado de los animales. Por ello, Gilberto hace un llamado a la población a no olvidarse de los animales. “Pedimos a todos que también nos apoyen, porque estos animalitos necesitan mucho, no solamente de nuestro cuidado, necesitamos la colaboración de todos para que estos animalitos no desaparezcan”, señala.
¿Cómo ayudar?
Si tienes las posibilidades de apoyar a uno de estos centros de rescate puedes hacerlo donando a través de la página www.amazonanimalorphanage.org en el caso de Pilpintuwasi, y https://laisladelosmonos.org/es/ en el caso de La Isla de los Monos. O también puedes apoyar a estos y otros centros de rescate del país con la campaña “Ellos también nos necesitan”, a través de las cuentas bancarias administradas por Profonanpe: en soles 191-98302549-0-02 (Banco de Crédito del Perú – BCP) y en dólares 191-98302554-1-07 (Banco de Crédito del Perú – BCP).
DATOS
Los centros de rescate, centros de cría y zoológicos a nivel nacional vienen pidiendo al Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) apoyo para mantener a los animales que tienen bajo su custodia. Mira algunos vídeos aquí.
Quistococha, el parque que alberga a distintas especies de animales en Iquitos, normalmente autosostenible, hoy está recibiendo fondos de parte del Gobierno Regional de Loreto (Gorel) para costear la alimentación, medicinas y cuidados de los animales, según indica Robner Rivas, director regional de Comercio Exterior y Turismo de Loreto.
Pilpintuwasi recibe apoyo de Animal Defenders International (ADI) para la alimentación y mantenimiento de los animales que llegaron al centro rescatados por esta organización.