Nosotros somos el cambio

Por Humberto Campodónico

Desde Big Timber, Miontana, EE. UU.

Es cierto, el país atraviesa una crisis económica. También es cierto que las cosas no van bien en Irak y que debemos afinar nuestra política. Cierto, el país necesita cambios. Pero esos cambios los va a traer John McCain. Es antipatriótico pensar que Obama y los demócratas van a traer el cambio. De ninguna manera. Esos "niñitos bien", que hablan bonito y van a las mejores universidades, no representan a la América profunda, no saben nada de los valores familiares y morales que defendemos.


Además, son unos cobardes y miedosos. En lugar de mantener el rumbo de la política de Bush en Irak, lo que plantean es sacar a nuestros "chicos" de allá. No se dan cuenta de la pésima influencia en nuestra reputación. Lo único que van a conseguir es envalentonar a los ayatollas en Irán, a Hezbolláh en El Líbano y a Hamas en Palestina.

De la misma manera, los rusos seguirán haciendo las "georgias" que les da gana y ni hablar de los chinos, que ya creen que son la primera potencia mundial. Y nuestros amigos en Israel, van a pensar que los estamos traicionando y los vamos a dejar solos. No, señor. El gasto militar tiene que aumentar porque necesitamos más tropas y más presencia militar en el mundo. EEUU tiene que seguir siendo la primera potencia mundial en el siglo XXI.

Las propuestas de poner más impuestos a los ricos que planea Obama son una tontería. Lo único que saben hacer los demócratas es poner más impuestos y gastar plata ("tax and spend"). No es cierto que Bush haya fallado cuando redujo los impuestos a los ricos y se agrandó el déficit fiscal. Lo que pasa es que los demócratas no entienden que el "chorreo" demora años en filtrar de arriba hacia abajo.

En verdad, los demócratas son unos comunistas que quieren poner impuestos a la clase media, como a Joe el gasfitero. Si ellos ganan, lo que va a pasar es que se van a llevar nuestra plata para redistribuirla a los pobres. Lo mismo que hizo Fidel Castro.

Los demócratas y Obama se están aprovechando de este bache temporal que tiene nuestra economía para lavarle la cabeza a la mayoría de la población. En verdad, lo que aquí ha fallado es el exceso de regulación gubernamental. Si ésta no hubiera existido, los mercados se hubieran comportado racionalmente pues siempre tienden al equilibrio.

Quieren que el paquete de salvataje de US$ 700,000 millones compre las acciones de los dueños de los bancos. Eso se llama nacionalización, es comunismo puro. Además, quieren que esa plata salve a los ciudadanos que no pueden pagar sus hipotecas. No señor, eso es introducir en el país el diabólico virus de la equidad y de la solidaridad. Es el sinónimo de lo que decía Marx: de cada cual según su capacidad, a cada cual según sus necesidades".

Pero quizá lo peor de todo es que el resentimiento se podría apoderar de nuestra patria. Si gana Obama van a repetir todo el tiempo a Martin Luther King: "Yo tengo un sueño que un día en las coloradas colinas de Georgia los hijos de los ex esclavos y los hijos de los ex propietarios de esclavos serán capaces de sentarse juntos en la mesa de hermandad. Sueño que mis cuatro hijos pequeños vivirán un día en una nación donde no serán juzgados por el color de su piel sino por el contenido de su carácter".

De ninguna manera. Nosotros encarnamos a la Nación. Sabemos interpretar lo que dijeron nuestros padres fundadores George Washington y Thomas Jefferson. Nosotros encontramos la ventana de oportunidad para sacarnos de encima el trauma de Vietnam con el atentado contra las Torres Gemelas. Ellos no saben nada de eso. Por eso, no pueden ganar. Somos y seguiremos siendo la mayoría. Somos el cambio.

Nota: Palabras más, palabras menos, esos son los argumentos de los neoconservadores, que son el ala fundamentalista del Partido Republicano (no todos los republicanos piensan así, valga la aclaración). Los propósitos arriba citados me fueron expuestos en una conversación, horas antes de las elecciones del 4 de noviembre.

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