Por conflictos sociales y fenómenos climatológicos. El Iedep de la CCL advierte que la caída drástica del PBI en Puno, Tumbes, Áncash y Tacna hace prever un incremento de los niveles de pobreza en esas regiones al cierre del año.
El producto bruto interno (PBI) peruano experimentó en el primer semestre una caída de 0,45%, panorama que se torna aún más complejo cuando se observa el desempeño económico de los departamentos del país, donde de 15 de los 24 departamentos muestran una caída del PBI, de los cuales 12 tienen dos trimestres consecutivos de contracción, así lo informó el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (Iedep) de la Cámara de Comercio de Lima.
“Puno lidera esta disminución con una pronunciada caída del 11,9 %, atribuida a las protestas sociales y paralizaciones. Incluso la caída del segundo trimestre (-13,4 %) fue más alta que la del primer trimestre (-9,8 %)”, sostuvo el jefe del IEDEP de la CCL, Óscar Chávez.
Precisó que el sector más afectado en ese periodo fue el agropecuario, que aporta más de la cuarta parte de su PBI, resultado generado por las heladas, la escasez de precipitaciones y la baja cosecha. Le siguen los sectores de minería e hidrocarburos, transporte y construcción, como resultado de los conflictos sociales.
Además, Puno es el departamento que se ubica en el grupo de mayor nivel de pobreza, que aqueja a entre el 39,4 % y 43,3 % de su población, según resultados de 2022. “Estas cifras podrían incrementarse al finalizar el presente año”, advirtió Óscar Chávez.
Otros departamentos fuertemente afectados son Tumbes (-5,5 %), Áncash (-5,4 %) y Tacna (-5,3 %), todos con caídas en ambos trimestres. En el primer caso, como consecuencia de factores climatológicos adversos y bajos niveles de cosecha, que afectaron al sector agropecuario; y de la caída de la construcción en el segundo trimestre del año.
En el caso de Áncash, los conflictos sociales redujeron la producción minera y los climatológicos afectaron la actividad agrícola. En tanto, la caída de Tacna se debió a la menor producción de sus principales extracciones mineras, como el cobre y el molibdeno.
“Al igual que Puno, los resultados obtenidos al primer semestre del año hacen prever que los niveles de pobreza en estas tres regiones se incrementarán al culminar 2023”, comentó.
Sin considerar Lima, los departamentos de Puno, Tumbes, Áncash y Tacna aportan el 15,7 % del PBI nacional, el 17,5 % del empleo formal y concentran el 12,2 % del crédito total otorgado por el sistema financiero.
Otro bloque de departamentos también tiene economía contraída, pero de menor magnitud con respecto al primer grupo señalado. Se trata de Lambayeque (-3,5 %), Ucayali (-2,6 %), Huancavelica (-2,5 %), Madre de Dios (-2,2 %), Pasco (-2,0 %), Cajamarca (-1,5 %), Ayacucho (-1,4 %), Lima (-1,2 %), Arequipa (-1,0 %), La Libertad (-0,7 %) y Junín (-0,3 %), afectados por la manufactura, la construcción y las telecomunicaciones, que figuran entre los sectores con mayor caída en lo que va del presente año.
DEPARTAMENTOS QUE MÁS CRECIERON
En tanto, fueron 9 departamentos los que registraron crecimientos en su PBI al primer semestre de 2023. Este grupo es liderado por Moquegua (46,1 %) y Apurímac (14,1 %). En el caso de Moquegua, el inicio de operaciones de la empresa Anglo American Quellaveco, en septiembre de 2022, ha llevado a un crecimiento explosivo en la producción de cobre y molibdeno. El crecimiento del sector minería e hidrocarburos fue de 226 % y 227,7 % en el primer y segundo trimestre, respectivamente.
En lo que respecta a Apurímac, en el primer trimestre del año prácticamente todo su aparato productivo estaba en caída o detenido. Pero, en el segundo trimestre, la producción minera se expandió en 138,8 %, ante la mayor extracción de molibdeno y cobre de Las Bambas.
“Hay que recordar que, a diferencia de lo sucedido en Moquegua, esto es solo un efecto estadístico, pues de abril a junio de 2022 la producción de Las Bambas fue paralizada por conflictos sociales”, mencionó el jefe del Iedep.
Asimismo, se observó el desempeño favorable en Piura (5,1 %), Huánuco (4,5 %), San Martín (1,9 %), Loreto (1,3 %), Cusco (0,9 %), Amazonas (0,4 %), e Ica (0,2 %), con sectores comunes a los departamentos líderes, además del comercio, transporte, y alojamiento y restaurantes.