En el diario limeño Perú21 del 15 de setiembre de este año, con el título “Recordando: Los tiempos de Tarata”, se lee en la columna de Carlos Tapia:
El coche-bomba en Tarata (16/7/1992) se enmarcó en el fracaso de la estrategia de Sendero Luminoso basada en un supuesto “equilibrio estratégico” impulsado durante los años 1989-91. El ‘presidente Gonzalo’, engatusando a sus seguidores, planteó que para tomar el poder su estrategia de guerra popular ‘del campo a la ciudad’ obligaba ya a incrementar el accionar terrorista en la capital.
Comentario
No debemos emplear el verbo “accionar” como si fuese sustantivo. Es un error de moda en la prensa. Además, con su significado real, “poner en movimiento un mecanismo”, está fuera de contexto. Tenemos que escoger otro sustantivo para acompañarlo con el calificativo de “terrorista”.
Podemos decir por ejemplo:
El coche-bomba en Tarata (16/7/1992) se enmarcó en el fracaso de la estrategia de Sendero Luminoso basada en un supuesto “equilibrio estratégico” impulsado durante los años 1989-91. El ‘presidente Gonzalo’, engatusando a sus seguidores, planteó que para tomar el poder su estrategia de guerra popular ‘del campo a la ciudad’ obligaba ya a incrementar la arremetida terrorista en la capital.