Un potente tornado en la ciudad Moore, en los suburbios de Oklahoma City, causó hoy 51 muertos, entre ellos 20 niños, y 120 heridos, cifras que irán posiblemente en aumento.
El fenómeno fue gigantesco, pues se estima su diámetro en tres kilómetros de diámetro alcanzó este lunes el área sur de Oklahoma City (Oklahoma), arrasando a su paso numerosas casas y algunas escuelas. El Centro de Predicción de Tormentas de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por su sigla en inglés) ha señalado, en sus primeras estimaciones, que se trata de un tornado de categoría EF4, la segunda máxima. Según los meteorólogos, los vientos alcanzaron los 320 kilómetros por hora.
La cadena local KFOR informó que 75 niños se encontraban dentro de la escuela de primaria Plaza Towers cuando el tornado sacudió el edificio. Se confirma la muerte de siete niños en la escuela y se estima que otros 30 menores podrían seguir atrapados, aunque hay pocas esperanzas de encontrarlos con vida, informan medios locales. Los alumnos rescatados cuentan que sus profesores los protegieron con sus cuerpos durante el paso del tornado.
Los colegiales sufrieron las consecuencias debido a que el tornado azotó la zona en horas de estudio. La escuela de primaria Briarwood también ha resultado afectada por el tornado. Aparentemente hay niños atrapados y heridos bajo los escombros. Según informa la cadena News 9, a pesar del mal tiempo, las clases en la escuela no fueron suspendidas.