El Ejército sirio ha descubierto en la capital un almacén de sustancias químicas tóxicas perteneciente a los insurgentes, según informó la televisión siria.
El depósito fue diseñado tanto para la producción como el almacenamiento de sustancias, entre las cuales se encontró cloro.
Mientras tanto varios altos cargos de la ONU se están preparando a viajar a Damasco para discutir acerca de la supuesta utilización de armas químicas en el conflicto sirio y acordar los términos de la investigación sobre la misma.
Esta semana el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, insistió en la validez de las pruebas de una investigación independiente, presentada ante la ONU y cuestionada por los EE. UU , que demuestran que rebeldes sirios usaron gas sarín en Alepo el pasado mes de marzo.
Tras tomar muestras sobre el terreno y analizarlas en un laboratorio ruso certificado por la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, los expertos rusos concluyeron que el proyectil y la carga de sarín que contenía fueron de fabricación no industrial.
Los resultados fueron entregados a la Secretaría de las Naciones Unidas y a los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU.
Damasco instó a la ONU a investigar el posible uso de armas químicas en la localidad de Khan al Assal, cerca de la ciudad siria de Alepo en marzo. Los expertos y funcionarios militares informaron que una sustancia química, probablemente gas sarín, había sido utilizada en el ataque en el que murieron unas 30 personas.
Russia Today, 14.07.2013