EE.UU. está gobernado por personas que en realidad "son nazis hasta la médula", sostiene Paul Craig Roberts, quien trabajó en la Administración de Ronald Reagan.
"Creo que en EE.UU. tenemos estos nazis, conocidos como neoconservadores. Ellos en realidad son nazis hasta la médula. Cada uno de ellos sería muy feliz en las altas esferas del gobierno nazi, en la Alemania de Hitler", dice Roberts. Según él, los políticos estadounidenses están seguros de que el colapso del socialismo significa que no hay alternativa a América. "Eso, a su juicio, hace que EE.UU. se convierta en una nación indispensable, que tiene el derecho de imponer su voluntad en todo el mundo", explica el experto, quien jugó un papel importante en la creación del sistema económico que se conoció como la 'Reaganomía'.
Cada uno de ellos sería muy feliz en las altas esferas del gobierno nazi, en la Alemania de Hitler
En su opinión, a partir del siglo XXI, el presidente de EE.UU. ya no es responsable ante la Constitución, que "ya no es más que un trozo de papel", mientras que el gobierno no es responsable ante el pueblo.
La culpa la tienen los 'lobbistas', explica Roberts. Hay alrededor de seis grandes grupos de intereses, que en realidad gobiernan el país. Según él, se trata del grupo de Wall Street, el grupo militar, el 'lobby' pro Israel, negocios agrarios, 'lobbies' de la energía y de la madera. "Son ellos los que escriben todas las leyes que el Congreso aprueba y el presidente firma", sostiene Roberts.
Según Roberts si en el siglo XX hubo como mínimo dos grandes dictadores, Hitler y Stalin, hoy todo el mal del mundo se concentra en Washington. Por eso existe el PRISM, por eso Edward Snowden "podría pasar el resto de su vida en el aeropuerto de Rusia" y por eso cualquier persona inocente en cualquier parte del mundo puede ser arrojada a una cárcel estadounidense, asegura. "La gente de Bush solía decir y la gente de Obama lo continua diciendo: 'Podemos capturar a quien queramos en cualquier parte del mundo y ponerlo en la cárcel'. ¡Eso es una violación increíble!", concluye Roberts.
Russia Today, 24.07.2013