El papa Francisco nombró a una joven consultora entre los profesionales seleccionados para reformar la estructura económica y organizativa de la Santa Sede.
La nueva funcionaria es Francesca Chaouqui, italiana de padre marroquí; experta en relaciones públicas, de 20 años, quien deberá aconsejar al Romano Pontífice en la reforma de la estructura económica y financiera de la Santa Sede.
Chaouqui trabaja con el español Ángel Vallejo, encargado de las cuentas vaticanas y con otros seis asesores nombrados por Francisco. Ella es la única mujer y la única italiana.
Conocido su nombre, algunos medios italianos revelaron que es amiga del periodista que publicaba los documentos robados a Benedicto XVI por su propio mayordomo. No dudó en felicitarle por las filtraciones.
Otros rastrearon sus opiniones antes de su nombramiento y publicaron sus comentarios en Twitter, donde dijo que Benedicto XVI sufría leucemia y que el cardenal Bertone, su secretario de estado, era un corrupto que ha convertido el Vaticano en un negocio personal. También había arremetido contra el exministro de Economía de Berlusconi, por lo cual fue denunciada por éste.
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