Villarán, ¿miente o presenta degeneración cerebral por las drogas?
Por Rocío Ferrel
Una y otra vez niega lo que dijo públicamente: aborto, drogas, debate con Lourdes
Toda la prensa y el público fue testigo de diversas declaraciones de la candidata a la alcaldía de Lima Susana Villarán, quien se pronunció en favor de la despenalización del aborto, de la comercialización libre de las drogas y que retó a debate a Lourdes, "Lourdes, te reto a que vengas a la orilla del río", dijo. No obstante, ahora Villarán niega o maquilla sus dichos.
Ahora maquilla sus declaraciones diciendo que sólo promovió un debate sobre la erradicación de las drogas. ¿Qué autoridad moral tiene para discutir el tráfico de drogas una persona que consumió y quizás sigue consumiendo drogas? También dice que no se pronunció en favor del aborto y, sobre el debate, que ella no lo propuso porque fue cosa de la prensa.
Además, toma a los ciudadanos por retrasados mentales cuando dice que ella no tiene en su plan la libre venta de drogas. Si lo tuviera cometería delito, además ella no es el Congreso ni el Ejecutivo para dar una ley de venta libre de drogas, no es un asunto municipal, pero sí es una inmoralidad promover con su opinión a favor la venta libre de drogas.
Tal vez países como Suiza, donde el Estado invierte fuertes cantidades de dinero en educación, podrían iniciar ese debate, porque allá el ser humano con su educación tiene mayor capacidad de rechazar lo malo y el vicio, no en países donde recién se lucha contra el analfabetismo como es en América Latina, donde una venta libre sería una gran perdición para las nuevas generaciones. Pero ni en Suiza ven con buenos ojos esa posibilidad, por considerar que es un grave riesgo.
El estado mental de Villarán: miente o su cerebro está dañado
Una de las posibilidades por las cuales niega lo que dijo una y otra vez es que esté presentando degeneración en sus funciones cerebrales, que es uno de los efectos que le puede haber dejado el consumo de drogas, que además, causa la desinhibición: las personas paulatinamente pierden sus escrúpulos morales con el consumo de droga. También podría tratarse de demencia senil ya iniciada. Hay pacientes que presentan este mal desde antes de los 50 años, y Villarán tiene más de 61 años.
Un consumidor no tiene reparos en hablar y obrar en contra de los principios morales de su sociedad: tenemos jóvenes que tras consumir drogas caen en la promiscuidad sexual, que incluso la hacen pública; la mentira, el comportamiento disfuncional o inmoral en el trabajo y hasta el robo y el crimen en los casos más graves. El sujeto cae en la anomia.
En el caso de Villarán vemos la anomia por las siguientes evidencias:
Ver aquí video que prueba las declaraciones de Villarán
Además, toma a los ciudadanos por retrasados mentales cuando dice que ella no tiene en su plan la libre venta de drogas. Si lo tuviera cometería delito, además ella no es el Congreso ni el Ejecutivo para dar una ley de venta libre de drogas, no es un asunto municipal, pero sí es una inmoralidad promover con su opinión a favor la venta libre de drogas.
Tal vez países como Suiza, donde el Estado invierte fuertes cantidades de dinero en educación, podrían iniciar ese debate, porque allá el ser humano con su educación tiene mayor capacidad de rechazar lo malo y el vicio, no en países donde recién se lucha contra el analfabetismo como es en América Latina, donde una venta libre sería una gran perdición para las nuevas generaciones. Pero ni en Suiza ven con buenos ojos esa posibilidad, por considerar que es un grave riesgo.
El estado mental de Villarán: miente o su cerebro está dañado
Una de las posibilidades por las cuales niega lo que dijo una y otra vez es que esté presentando degeneración en sus funciones cerebrales, que es uno de los efectos que le puede haber dejado el consumo de drogas, que además, causa la desinhibición: las personas paulatinamente pierden sus escrúpulos morales con el consumo de droga. También podría tratarse de demencia senil ya iniciada. Hay pacientes que presentan este mal desde antes de los 50 años, y Villarán tiene más de 61 años.
Un consumidor no tiene reparos en hablar y obrar en contra de los principios morales de su sociedad: tenemos jóvenes que tras consumir drogas caen en la promiscuidad sexual, que incluso la hacen pública; la mentira, el comportamiento disfuncional o inmoral en el trabajo y hasta el robo y el crimen en los casos más graves. El sujeto cae en la anomia.
En el caso de Villarán vemos la anomia por las siguientes evidencias:
- En el ministerio de la Mujer su comportamiento fue disfuncional por no hacer buena labor y provocar escándalos financieros, como lo señala el informe de auditoría (ver Salen a luz los escándalos de auditoría a Villarán cuando fue ministra de la Mujer)
- Pese a decirse luchadora por los derechos humanos, su inmoralidad en materia de DD. HH. llegó al extremo de ir a Madre Mía a llorar por unos huesos que nunca aparecieron, todo para oponerse a Ollanta Humala, quien salió libre de las acusaciones. Pero habiendo muchos esqueletos acusadores del primer gobierno de García por las matanzas de Cayara, Accomarca, el Frontón, y otros, hizo cola, junto con Humberto Lay Sun, para felicitarlo cuando ganó las elecciones (sin contar con las acusaciones contra él por enriquecimiento ilícito que lo llevaron a fugar a París a esperar la prescripción). Cabe señalar que Lourdes Flores ni Ollanta Humala se rebajaron a tanto como Villarán, que se le vio haciendo cola en plena calle para saludar a García.
- Se proclama católica y alardea con sus fotos de primera comunión y dice ser seguidora del padre Gustavo Gutiérrez, pero en sus declaraciones promueve el matrimonio entre homosexuales, contradiciendo al mismo Papa. El Vaticano es muy preciso y está en contra de los casamientos civiles calificándolos de inmorales. Claramente lo dijo el entonces cardenal Joseph Ratzinger, hoy Benedicto XVI en el documento que publicó siendo prefecto de la Congregación Para la Doctrina de la Fe, que dice sobre los matrimonios civiles entre homosexuales, que el católico debe:
Desenmascarar el uso instrumental o ideológico que se puede hacer de esa tolerancia; afirmar claramente el carácter inmoral de este tipo de uniones; recordar al Estado la necesidad de contener el fenómeno dentro de límites que no pongan en peligro el tejido de la moralidad pública y, sobre todo, que no expongan a las nuevas generaciones a una concepción errónea de la sexualidad y del matrimonio, que las dejaría indefensas y contribuiría, además, a la difusión del fenómeno mismo. A quienes, a partir de esta tolerancia, quieren proceder a la legitimación de derechos específicos para las personas homosexuales conviventes, es necesario recordar que la tolerancia del mal es muy diferente a su aprobación o legalización.
Ante el reconocimiento legal de las uniones homosexuales, o la equiparación legal de éstas al matrimonio con acceso a los derechos propios del mismo, es necesario oponerse en forma clara e incisiva. Hay que abstenerse de cualquier tipo de cooperación formal a la promulgación o aplicación de leyes tan gravemente injustas, y asimismo, en cuanto sea posible, de la cooperación material en el plano aplicativo. En esta materia cada cual puede reivindicar el derecho a la objeción de conciencia.
- Promueve el aborto al proponer su despenalización, crimen grave contra el cual la Iglesia Católica realiza una lucha en todo el mundo.
- Promueve el consumo de drogas al proclamar que fumó drogas. Pero como las víboras, dijo brevemente que no recomienda fumarlas, no obstante, inmediatamente después dijo que Bill Clinton fumó drogas, soltando así a la juventud el mensaje de que puedes llegar a ser importante si fumas drogas.
- No contenta con promover el consumo de drogas, Villarán se pronunció a favor de la venta libre de la droga. ¿Qué autoridad moral tiene para hablar de esa materia una persona que consumió drogas y que no sabemos si las sigue consumiendo? Esta persona es peligrosa porque con estos antecedentes busca rodearse de jóvenes.
- En "Enemigos Íntimos", Villarán narró que en un cine de San Isidro se inició en el consumo de la marihuana. “Yo creo que la guerra con las drogas no la vamos a vencer con represión, la capacidad de corromper que tiene el narcotráfico es absoluta y total. Lo que tiene que hacerse es legalizarse y entrar en una lucha frontal contra el narcotráfico. Legalicemos todo. Debería venderse en farmacias, con control de calidad y a un precio accesible”, dijo muy suelta de huesos.
Ver aquí video que prueba las declaraciones de Villarán