Motivo: EE. UU. se opone a que esos aviones derriben avionetas de traficantes de drogas.

No es que Honduras no quiera o no pueda reparar sus aviones supersónicos F-5 por motivos económicos, sino que Estados Unidos se lo estaría impidiendo al entrar en contradicciones con una ley catracha que autoriza el derribo de aeronaves consideradas narcos.

F5 Honduras

Al menos es lo que se colige de una publicación de la web www.defensa.com, que recuerda que los famosos F-5, los mejores que existen en Centroamérica, fueron donados al país vecino del norte por Estados Unidos tras conocerse que Nicaragua —en los años 80 del siglo pasado—, compraría a la que fue Unión Soviética aviones MIG-21 que al final no vinieron y algunos de los pilotos entrenados terminaron taxeando.

El asunto es que ahora el gobierno norteamericano estaría bloqueando la reparación o repotenciación de los viejos F-5E que regaló a Honduras, debido a una presunta cláusula que prohíbe que salgan del país, al igual que los A-37B o el C-130, por temor a que otros países tengan acceso a la tecnología estadounidense.

En círculos hondureños se aseguró que técnicos israelíes ya se encontraban asistiendo en la recuperación de los F-5E, que devolverían la supremacía aérea a Honduras, ahora en poder de El Salvador con sus también veteranos cazabombarderos Cessna A-37 Dragonfly. Se señala que tampoco le permitieron reparar los F-5 a Brasil y Taiwán.

Estados Unidos ha manifestado su inconformidad por la aprobación de la Ley de Protección de Cielos que permite el derribo de aviones sospechosos de ingresar con droga al país. Como medida de rechazo a esta legislación, Estados Unidos suspendió hace dos meses la ayuda de radar que brindaba a Honduras para la detección de narcoavionetas.

Los F-5 de la FAH fueron suplidos en la década de los 80 por Estados Unidos ante la escalada armamentista de Nicaragua. Estados Unidos necesitaba un país que impusiera un balance y contrarrestara las operaciones de expansión del comunismo en la región.

En primera instancia, Honduras había solicitado la compra de 12 F-5E, pero Estados Unidos rehusó entregarlos, así que Honduras contrató con Israel la adquisición de 12 aviones Kfirs por 125 millones de dólares, contrato al que se opuso EEUU, pues los Kfir usan motor GE J-79, que necesitan aprobación de exportación, según el portal defensa.com.

Pero ante la posibilidad de que Nicaragua contara con aviones MIG-21, el Congreso de Estados Unidos aprobaría el Plan Bonito, que suministró 10 F-5E y 2 F-5F, a un costo de 75 millones de dólares, asumidos en el Programa de Asistencia Militar.

Fue así que el Departamento de Estado hizo la donación de los F5, que partieron desde la Base Aérea de Kelly entre junio de 1987 y enero de 1989, portando los numerales 4001 y 4002 (F5F), y 4003 a 4012. Los F-5E debían reemplazar los Súper Mystere B.2 de la FAH, que habían sido modificados en Israel con motores estadounidenses, 8 de ellos habían sido renovados en los mismos Estados Unidos antes de la entrega de los F5, recuerda el portal.

El Cronista Digital, Managua 09-06-2014

http://elcronistadigital.com/?p=32580

  

Favorece al tráfico de drogas

—Los éxitos de Nicaragua y Costa Rica interceptando cargamentos de droga en el mar obligan a los mafiosos a utilizar avionetas, a las cuales EE. UU. desea proteger.

—En la década de 1980 EE. UU. recurrió al dinero de las drogas para armar a los contrarrevolucionarios nicaragüenses (caso Irán-Contras)

—En Afganistán, antes de la invasión de EE. UU., los talibanes prácticamente habían eliminado los cultivos de amapola. Ahora con la ocupación yanqui ese cultivo y la producción de heroína han crecido hasta convertirse en gravísimo peligro para países vecinos y Rusia.

—En el Perú los dólares que nutren al narcoterrorismo vienen de EE. UU., destino final de las drogas.

[Nota de Con nuestro Perú.]