El diamante Wittelsbach alcanza 24 millones 300 mil dólares

El Wittelsbach, uno de los más bellos y raros diamantes del mundo, alcanzó la cifra de 16 millones 400 mil libras esterlinas (24 millones 300 mil dólares) en la subasta realizada por la casa Christie’s de Londres, donde fue adquirido por Laurence Graff, de 69 años, joyero de Bond Street.


“Si no fuese por el problema crediticio, este diamante hubiese alcanzado 50 millones de libras (unos 74 millones de dólares), hemos hecho el trato del siglo”, declaró Graff, quien piensa pulir la piedra, que presenta algunas rayaduras pequeñas, y engastarla en otra joya, para volverla a vender.



La subasta superó las expectativas, pues se estimaba que el remate alcanzaría los 16 millones de dólares, y con 24 millones 300 mil dólares se convierte en la piedra preciosa más cara de la historia de las subastas.

El imponente diamante azul acero perteneció a la infanta Margarita Teresa de España, célebre por haber sido retratada en “Las Meninas” del pintor Diego de Velázquez.

La extraordinaria gema, de 35.56 quilates, fue regalada por Felipe IV de España, a la infanta Margarita Teresa con motivo de su boda con Leopoldo I de Austria, quien llegó a ser Emperador del Sacro Imperio Romano.

Margarita Teresa murió tan sólo a los 21 años, tras dar a luz su cuarto hijo, que no llegó a la adolescencia.

El diamante fue extraído en la India y después del casamiento de la infanta pasó de España a Austria y fue parte de las joyas de la corona bávara hasta 1931, cuando fue vendido.

La puja final se produjo entre dos postores y comenzó en cuatro millones de libras, para subir rápidamente a 10 millones en la pugna de Graff con el ruso Aleks Paul, de Essex Global Trading, quien subía la oferta en 500 mil libras cada vez que uno de dos rusos que se situaron en la parte posterior le hacía señas con un movimiento de cabeza.

En tanto, las ofertas de Graff iban en ascenso por vía telefónica mediante el director de Christies’s, Raymond Sancroft-Baker.

Los incrementos en la puja empezaron a frenarse a partir de los 14 millones de libras, cuando Graff trató de subir sólo 100 mil libras, lo cual fue rechazado por el martillero, François Curiel, por lo que Graff debió aumentar a 200 mil libras más, hasta que Graff ofreció 14 millones 600, después de lo cual el ruso declinó menando la mano.

Con el premio al comprador de todas las subastas, el diamante alcanzó entonces la histórica cifra de 16 millones 393 libras esterlinas.

Graff compró hace dos semanas un diamante de 478 quilates (más de diez veces los 35.6 quilates del Wittelsbach) por 12 millones de libras esterlinas. Pero la mina que produjo el Wittelsbach se extinguió hace más de un siglo, por lo que será imposible encontrar esta clase de diamante de color azul, que es uno de los más grandes tesoros naturales de la humanidad.

Otros diamantes famosos permanecen en museos, éste es uno de los pocos que llegan al mercado. La anterior propietaria, que poseía la joya desde 1964, permanece en el anonimato.