Con una alta participación, los egipcios eligen presidente

Unos 50 millones de votantes están convocados a elegir entre 12 candidatos. Tras el resultado, la junta electoral que gobierna tras la caída de Mubarak deberá dejar el poder. Un policía murió en medio de un enfrentamiento entre facciones opuestas.

La participación en la primera jornada de las elecciones presidenciales egipcias para elegir al primer presidente en democracia del país, un acto cívico que supone la apertura de una nueva etapa en la que se espera que la Junta Militar abandone el poder, está siendo elevada, aseguró hoy la comisión electoral horas después del inicio de los comicios.

 

La participación está siendo especialmente alta en El Cairo y Giza, donde se vieron largas filas ante los locales electorales, ante un amplio despliegue de seguridad que provocó también un caos de tráfico, informaron medios estatales. "La participación es enorme y mayor de la esperada", dijo Hatem Begatu, secretario general de la comisión.

Begatu señaló que todos los locales excepto tres, abrieron a las 8 (hora local). Para los comicios se habilitaron 13.000 locales en las 27 provincias del país. Hombres y mujeres votan por separado y en muchos lugares la afluencia de mujeres fue mayor que la de hombres, indicaron testigos. Mañana también estarán habilitadas las urnas para que alrededor de 50 millones de electores elijan entre 12 candidatos.

Los resultados se conocerán el 29 de mayo. Puede haber segunda vuelta el 16 y 17 de junio, si ningún candidato supera el 50% de los sufragios.

Como primer incidente de la jornada se informó que un policía murió alcanzado por una bala en unos enfrentamientos entre partidarios de dos candidatos en una oficina electoral en El Cairo.

La Junta Militar egipcia, máxima autoridad provisional en el país desde la caída de Hosni Mubarak el 11 de febrero de 2011, aseguró que sus tropas están preparadas para garantizar la seguridad de las elecciones y advirtió contra aquellos que no respeten los resultados. El Ejército se comprometió a abandonar el poder antes del 30 de junio, después de la elección del nuevo presidente, pero podría tratarse de una falsa retirada, dado al peso político y económico de los militares, estiman especialistas.

La competencia entre los candidatos se presenta muy peleada, sin que hasta el momento se pueda saber quiénes pasarán a la segunda vuelta. Por un lado, están los aspirantes que se presentan como laicos, entre quienes está uno de los favoritos, el ex secretario general de la Liga Arabe, Amre Mussa. Y por otro lado, están los islamistas, entre los que se encuentra otro candidato con posibilidades de alcanzar la presidencia de este país, en una población con profundas convicciones religiosas, el moderado Abdel Moneim Abul Futuh.

Clarín