Benedicto XVI ha recibido esta mañana en audiencia al Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), José Graziano da Silva, que sucesivamente se ha encontrado con el cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado, a quien acompañaba el arzobispo Dominique Mamberti, Secretario para las Relaciones con los Estados.
“Durante los coloquios, que se han desarrollado en un clima de cordialidad, se ha puesto de relieve el aprecio por el compromiso de la Santa Sede y de la Iglesia católica en la lucha contra el hambre y la pobreza, sobre todo en el continente africano, y para mejorar la preocupante situación de la seguridad alimentaria mundial”, informa un comunicado de la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
“Se ha abordado también el tema de la existencia de los recursos suficientes para satisfacer las necesidades alimentarias de todo el mundo y de que, a pesar de ello, persistan obstáculos de orden económico, social y político que lo impiden. Por último, se ha manifestado el deseo de que el sector rural vuelva a asumir el papel principal en las estrategias de desarrollo; de que se promuevan modelos sostenibles de producción agropecuaria y de consumo alimentario y de que se garantice mayor equidad y eficacia en la gestión del sistema alimentario”.