El grupo terrorista libanés shií Hezbollah estableció varias bases en Siria, cerca de los sitios en los que el régimen del presidente sirio Bashar Assad, guarda parte de su enorme arsenal de armas químicas, según un reporte del periódico Yediot Aharonot.
La información sale a la luz bajo el telón de fondo de la gran preocupación en Israel de que el armamento no convencional sirio —considerado el más grande del mundo— caiga en manos del grupo extremista libanés*.
El primer ministro, Biniamín Netanyahu, ha llevado a cabo recientemente varias evaluaciones sobre la situación en el convulsionado país árabe vecino.
Mientras tanto, Israel envió al jefe de Consejo de Seguridad Nacional, Yaacov Amidror, a Moscú para convencer al Kremlin de que tome medidas para impedir que los arsenales sirios sean transferidos a las organizaciones terroristas.
Amidror tiene previsto reunirse en Moscú con el ministro de Exteriores, Serguei Lavrov y otros altos funcionarios.
Mientras tanto, el Ejército Libre de Siria afirma que ha tomado una base militar principal cerca del Aeropuerto Internacional de Damasco, un edificio de seguridad en Deir a Zor, cerca de la frontera con Irak, y varios puestos militares en la provincia de Idlib en el noroeste.
Aurora, Tel Aviv 28-01-2013
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* Ante el agotamiento de los militares sirios, parece que Hezboláh cuida los arsenales de armas químicas ante el peligro de que fuerzas especiales antisirias intenten tomar control de dicho material. Es difícil que intente llevárselas a Líbano porque todo está vigilado por los terroristas anti-Assad y por la OTAN. [Nota de Con nuestro Perú.]
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