El Ejército Popular de Liberación (EPL) de China decidió estar presente en Oriente Medio, región que arde por el conflicto entre Israel y Palestina, con seis buques de guerra, en medio de temores de la expansión de los choques armados a otros países vecinos.
El destructor Zibo
Según el South China Morning Post, integran la flota china el Zibo, un destructor de misiles guiados Tipo 052D, la fragata Jingzhou y el buque de suministro integrado Qiandaohu, formaban parte del 44.º grupo de trabajo de escolta naval del EPL.
El 14 de octubre, estos buques de guerra partieron de las costas de Mascate hacia un destino no revelado, según informaron los medios estatales chinos.
Estados Unidos ha desplegado el USS Gerald R Ford, su portaaviones más avanzado, y militares a dicha región en respuesta a la situación. Además, varios países, incluidos Gran Bretaña, Alemania y Francia, han enviado aviones militares o civiles para evacuar a sus ciudadanos de Israel.
China aún no ha anunciado un plan de evacuación, pero el Ministerio de Asuntos Exteriores chino aconsejó a los ciudadanos chinos que abandonen la zona lo antes posible mediante vuelos comerciales.
En situaciones anteriores, China ha utilizado buques de guerra de escolta similares a los que se encuentran actualmente en la región para las evacuaciones. Por ejemplo, en mayo, China envió un barco de suministros y un destructor Tipo 052D para evacuar a más de 1.000 chinos, brasileños y paquistaníes de zonas afectadas por conflictos armados.
En 2015, los buques de guerra chinos también contribuyeron a la evacuación de 225 extranjeros y casi 600 ciudadanos chinos de Yemen.
El 19 de octubre, el presidente chino Xi Jinping reafirmó la posición de Pekín sostenida por años en favor del establecimiento de un estado soberano de Palestina, según informaron los medios estatales. Destacó que este enfoque representa "la forma fundamental" de resolver el conflicto actual en la región.
El mandatario chino selñaló que la principal prioridad ahora es un alto el fuego lo antes posible, para evitar que el conflicto se expanda o incluso se salga de control y cause una grave crisis humanitaria.
