¿Por qué no investigan a Cipriani?
Fujimori dio orden de no dejar ningún prisionero vivo en la operación de rescate de los rehenes de la embajada de Japón, tomada por el MRTA en 1996, según reveló ayer el Archivo de Seguridad Nacional (NSA), organización que se dedica a la divulgación de información clasificada en los Estados Unidos, y que fue difundida ayer en la prensa.
Fujimori dio orden de ejecutar a cualquier prisionero, denuncia que ya había sido adelantada por el diplomático japonés Hidetaka Ogura poco después de la operación del 22 de abril de 1997.
Hoy, 11 años de la toma de la embajada, producida el 17 de diciembre de 1996, la confirmación de los crímenes y de la autoría de Fujimori viene de Estados Unidos al ponerse a luz los documentos secretos elaborados por organismos de inteligencia y por dependencias del Departamento de Estado norteamericano y enviadas por el Comando Sur estadounidense a las oficinas de la DIA, servicio de inteligencia de Estados Unidos.
Rolly Rojas, alias El Árabe, sucumbió luego de haberse rendido, el impacto de las balas le reventó el cráneo, que expelió la masa encefálica, la cual fue vuelta a poner en su lugar y arrastraron el cuerpo para taparlo con otro para que no se vea el detalle al momento en que Fujimori debía posar sonriente y triunfante, gozando con el cuadro macabro.
Estas nuevas evidencias de ejecuciones extrajudiciales harán más sustancioso el expediente del cobarde extraditado, que era “valiente” y abusivo rodeado de sirvientes armados, pero corría como cucaracha asustada cuando se sentía en problemas, como cuando se escondió en la embajada japonesa, o cuando huyó del país y renunció por fax.
Colina
Los documentos desclasificados también dan cuenta del conocimiento de Fujimori de las actividades del Grupo Colina, responsable de múltiples asesinatos.
La primera gran mentira en su juicio
“Si se cometieron hechos execrables, los condeno, pero no fui yo quien dio las órdenes”, dijo orondo ayer el acusado de múltiples violaciones a los derechos humanos. El juicio comienza comprobándose el comportamiento mentiroso de Fujimori, de todas maneras estas nuevas mentiras deberían ser tomadas en cuenta al momento de formar criterio.
¿Y Cipriani?
Recordemos que la periodista Sally Bowen aseveró que el cardenal Cipriani introdujo micrófonos en un crucifijo, aprovechándose de su condición de mediador. ¿Hasta dónde la participación y colaboración de quien dijo que “los derechos humanos son una cojudez”? ¿Cuál es el grado de participación del Cipriani y el Opus Dei en las violaciones de derechos humanos durante la dictadura? Recordemos que el opusdeísta Francisco Tudela fue el promotor de la ley para amnistiar al Grupo Colina.
Tras la toma de la embajada, el cardenal no cumplió con su deber moral de pastor al señalar públicamente la execrable conducta de Fujimori al posar gozoso sobre los cadáveres, más bien impresionó a la prensa con sus lágrimas de cocodrilo, tras haberse burlado de Jesús usando el crucifijo para un acto que terminó en crímenes.
Esperemos que los desclasificados echen más luces sobre la sombra que tendió sobre nuestro país el poder otorgado por Fujimori a Cipriani durante su corrupto y criminal régimen.
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