Esta semana Jorge Del Castillo causó revuelo tras su confesión sobre el favoritismo gubernamental aprista hacia sus partidarios. Pero Mauricio Mulder también confesó lo que pasa en el interior del gobierno aprista, cuando reveló las supuestas prebendas que recibirían los partidos a cambio de su condescendencia con el Apra en el Congreso.
Este 15 de diciembre, comentando sobre el trabajo en el Congreso, Mauricio Mulder declaró sobre Unión por el Perú, quejándose de que no cumplen con dar su apoyo pese a que han pedido “cosas” al gobierno: “Ellos piden cosas pero al final no se cuenta con ellos, se abstienen”, lamentó Mulder en Canal N.
Resulta muy interesante esta confesión, por lo que habría que preguntarnos, echando mano a un poco de lógica:
¿Qué es lo que piden los de UPP? ¿Se trata de puestos en el gobierno, favores a empresarios o amigos, creación de universidades, condescendencia con lobbies, cese de investigaciones a sus partidarios?
Si el Apra cuenta con ellos y después se decepciona, como manifiesta Mulder, entonces quiere decir que el gobierno habría cumplido en conceder esas “cosas” que pidieron y UPP falla en la contraparte, no corresponde a esas dádivas, como esperaban los apristas.
Si sólo acusa a UPP, entonces quiere decir que los fujimoristas y Unidad Nacional (con los que suman mayoría) sí habrían pedido “cosas” y después habrían honrado su palabra, por lo cual no hay queja de Mulder contra ellos.
No descartamos que el Partido Nacionalista esté comprendido en estos acuerdos bajo la mesa. En todo caso, serían ellos los que tendrían que deslindar, pero resulta menos probable, debido a que con las otras dos agrupaciones (UPP, UN fujimorista) al Apra suma suficiente mayoría.
El Apra estaría descubriendo una desagradable novedad en su vieja historia de componenda, al darse con sorpresas que le deparan los desvergonzados y aprovechados tránsfugas de UPP, encabezados por Aldo Estrada, quienes obtienen “cosas” y no siempre retribuyen con el favor político correspondiente.
Lo que une a este disparejo y conflictivo par de desleales socios es su condición de sirvientes incondicionales de Chile, pues ven toda clase de estropicios contra nuestra patria, pero ponen por delante sus intereses y “cosas” personales, siendo testigos del maniobrar del gobierno más prochileno de la historia.
Recordemos que Aldo Estrada, para torcer el voto de su bancada para la mesa directiva del Congreso, declaró: “Ustedes me aprueban la universidad de Juliaca y yo voto por ustedes”.