Después de consentir a las mineras, lobbista PPK dice que las castigaría pedro_pablo_kuczynski_25.jpg

“Si las mineras no cumplen con sus obligaciones las cerramos y punto", dijo


El lobbista de mineras y candidato presidencial de la Alianza por el Gran Cambio, Pedro Pablo Kuczynski, dice que si gana las elecciones hará respetar las obligaciones que tienen estas empresas con sus trabajadores y con el país.

“Si las mineras o la siderúrgica no cumplen con sus obligaciones con los trabajadores y el medio ambiente, las cerramos y punto”, escribió  en su cuenta de Twitter y habló también de “mano dura”.

El lobbista desnudado por  Wikilieaks

Como se recordará, durante el gobierno de Alejandro Toledo una de las tareas principales de PPK eran las desarrolladas en el sector Energía y Minas. Así PPK se encargó de mantener una débil estructura fiscalizadora y sancionadora sobre las empresas que contaminan el ambiente o explotan a los trabajadores, para que contaminen lo que quieran y exploten lo que quieran sin ser sancionadas ni cerradas.

De modo que PPK ya tuvo su oportunidad, ya fue poder con Toledo y ambos  se burlaron del Perú tratando no con "mano dura", como dice PPK, sino con el pétalo de la rosa a las mineras, que llegaron creyendo que el Perú es un basural donde pueden contaminar todo lo que deseen, pese a que en sus países de origen sí cumplen estrictamente con todas las normas de respeto al ambiente, porque saben que si no lo hacen serán castigadas.

Entre numerosísimos casos, el más horrible es el del derrame de mercurio de  Yanacocha, ocurrido durante la dictadura de Fujimori, uno de los más graves y venenosos del mundo, sin que haya sanción para los responsables ni cierre de la mina, pese a que deja contaminación  durará por interminables generaciones que padecerán con ese medi ambiente 

PPK  también aprovechó sin criticar la Constitución de Fujimori, que da categoría de ley a los contratos con las empresas extranjeras, lo cual es base de infinidad de faenones.  Por eso convenía que su régimen no llame a una asamblea constituyente.

Así, por ejemplo, en lugar de ser concesionarios que deben vender los recursos que extraen bajo las regulaciones que el Estado establezca, estas empresas se convierten en dueñas de los recursos de todos los peruanos, perpetrándose aberraciones sin nombre, como la venta de el gas extremadamente subvaluado al exterior, muy por debajo de los precios internacionales (ver Camisea: exportar a 1 e importar a 80) o la negativa de venta a las empresas peruanas de metales y otros recursos, para preferirlos a los extranjeros pisoteando a los empresarios nacionales (ver Transnacionales se niegan a vender minerales del Perú a los empresarios nacionales) .