Mandatario sostuvo que su objetivo es transformar el crecimiento de la economía peruana en desarrollo y calidad de vida, y así poner fin a siglos de pobreza y exclusión.
Afirmó que su gobierno se propone profundizar la democracia de tal manera que pueda resolver los problemas y necesidades de todos. “Hay que democratizar la democracia”, dijo.
“Queremos la integración plena de la sociedad peruana. Queremos un Estado atento a las necesidades de sus ciudadanos y comunidades”, señaló.
Aseveró que su gobierno “no escatimará esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado”.
Solicitó a la Unesco el reconocimiento de la Cocina Peruana como elemento representativo del patrimonio cultural y material de la humanidad.
Jefe de Estado dijo que es necesario levantar el bloqueo a Cuba y se sumó al pedido para reconocer a Palestina como un Estado.
Ante un auditorio conformado por Jefes de Estado de los países miembros de la Organización de las Naciones Unidas, el Presidente de la República, Ollanta Humala Tasso, sostuvo que su gobierno tiene como objetivo llevar adelante un proceso de crecimiento con Inclusión Social que beneficie a todos los peruanos, sobre todo a los que viven en pobreza y exclusión.
El mandatario indicó que esa tarea se concretará con responsabilidad, respetando el Estado de Derecho y sus valores. “Queremos transformar en desarrollo el crecimiento económico, en el que vivimos los peruanos y peruanas desde hace 10 años. En otras palabras, que el dinero se convierta en calidad de vida”, explicó al pronunciar su discurso en el marco del debate central del 66º Período de Sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Luego el mandatario indicó que ese proceso de realizar la gran transformación de nuestro país es tan irrenunciable como su fe en la democracia, y que por ello su gobierno se propone profundizar la democracia de tal manera que pueda resolver los problemas y necesidades de todos y no de una minoría.
Hay que democratizar la democracia, dijo, a través de políticas públicas diseñadas desde el Estado. “La democracia es la base para la autodeterminación de un pueblo, y el Estado debe estar preparado para asumir esta voluntad con lealtad. Este es el fundamento de una democracia soberana. Gobernamos a través de la concertación, en lo interno y en lo externo; salvaguardando todas las libertades, con tolerancia, y, sobre todo, escuchando a nuestros ciudadanos, sin distinción de clase, raza o género”, señaló.
Asimismo, reiteró su identificación con el pensamiento del ex presidente de Sudáfrica Nelson Mandela, al decir que: “No hay democracia con miseria, no hay democracia con asimetrías sociales”. El presidente Ollanta Humala manifestó también que su gobierno plantea un Estado que recupere la capacidad de desplegar políticas que atiendan las necesidades y aspiraciones de todos los peruanos. En ese sentido, renovó el compromiso del gobierno peruano con los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Inclusión social
El presidente Ollanta Humala remarcó que la Inclusión Social requiere de servicios públicos de calidad y de igualdad de oportunidades. “Los ciudadanos requieren acceso a la salud, a la educación, a una vivienda, al empleo digno y a la seguridad social. Hablamos de integración plena en el interior de la sociedad peruana. Queremos un Estado atento a las necesidades de sus ciudadanos y comunidades. Este es su rol prioritario”, señaló.
También indicó que los proyectos de inversión deben respetar el entorno humano y ambiental en que se desarrollan. “Esto ya está siendo comprendido por los inversionistas. Fruto de negociaciones, el Estado y las comunidades contarán con mayores recursos para proyectos de inversión social. Con esto favorecemos la cohesión social y la estabilidad democrática, y, al mismo tiempo, un entorno más favorable para la inversión que el país necesita”, apuntó.
Resaltó que la promulgación de la Ley de Consulta Previa atiende las demandas de las comunidades indígenas del Perú, haciéndolas partícipes de importantes decisiones. “De esta manera afirmamos que todos los peruanos y peruanas somos ciudadanos de primera categoría cumpliendo un compromiso asumido por el Estado peruano en mérito al Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo”, destacó el mandatario.
Derechos de la mujer y racismo
Siempre en la línea de la Inclusión Social, el presidente Ollanta Humala, sostuvo que su gobierno viene priorizando la atención de las necesidades de los más frágiles y desprotegidos, como los niños y ancianos; y también trabajando por los derechos de la mujer y de quienes históricamente han sido objeto de discriminación. Destacó, en ese sentido, el acierto de la creación de “ONU-Mujer”.
Asimismo, ratificó su compromiso con la Declaración y Programa de Acción adoptados en la Conferencia Mundial de Durban contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y las Formas Conexas de Intolerancia.
Lucha contra el narcotráfico
Ante la comunidad internacional, el presidente Ollanta Humala sostuvo también que su gobierno “no escatimará esfuerzos en la lucha contra el narcotráfico y el crimen organizado”, que constituyen unas de las más graves amenazas mundiales.
“El narcotráfico no ha sido derrotado, peor aún, su poder e influencia aumentan cada día. Reconocer esta realidad es un avance importante que permitirá restablecer una política integral, concertando con los actores responsables y otorgando igual importancia al control de la oferta como a la reducción de la demanda”, manifestó, para luego sostener que es necesario actuar firme y coordinadamente para combatir todos los eslabones de esa cadena delictiva.
Luego explicó que su gobierno busca que la política antidrogas, además de la erradicación de cultivos ilegales de coca, contemple la inclusión de los campesinos productores en programas de desarrollo alternativo. “Sin esto la erradicación será insuficiente para alcanzar nuestro objetivo”, expresó.
Manifestó también que las bandas de narcotraficantes se aprovechan de situaciones de pobreza y de la debilidad del Estado en zonas de difícil acceso. “Necesitamos mayores capacidades de inteligencia financiera para detectar el lavado de activos, controles más efectivos sobre los insumos y, en el plano de la seguridad, necesitamos controlar el suministro de armas con las que cárteles y pandillas atentan a diario contra la seguridad ciudadana”, añadió durante su discurso.
Asimismo, informó que ha convocado para el segundo trimestre del próximo año una reunión de ministros de Relaciones Exteriores y jefes de organismos encargados de la lucha contra las drogas para abordar en Lima estos asuntos y definir acciones concretas.
Diversidad y medio ambiente
El Jefe de Estado resaltó también que el Perú es un país multicultural que está en proceso de reconocer la riqueza de su propia diversidad y destacó que nuestro país vive una revolución gastronómica.
Luego de demostrar que la diversidad de nuestra comida contribuye a la inclusión social y el desarrollo sostenible, solicitó a la Unesco el reconocimiento de la Cocina Peruana como elemento representativo del patrimonio cultural y material de la humanidad.
En otro momento, dijo que los países deben trabajar coordinadamente para mitigar el Cambio Climático y el Efecto Invernadero, cuyos impactos se amplifican en los sectores sociales más vulnerables. Explicó que en el Perú se está trabajando en la promoción del uso de energías limpias, la reforestación, la educación medioambiental y el reconocimiento de los derechos de participación de las comunidades que poseen el conocimiento tradicional.
Demandó, además, a la cooperación internacional que se incremente la ayuda financiera y técnica destinada a prevenir y mitigar los efectos del cambio climático; y exhortó a los países industrializados a que asuman y cumplan el compromiso de reducir de manera sustantiva sus emisiones de Carbono.
Política migratoria
El presidente Ollanta Humala invocó también un trato más justo y digno para las personas ilegales, que con su trabajo “contribuyen a la economía de sus países de origen y de residencia. Su marginación solo podrá favorecer a una mayor informalidad en la que campean mafias y redes criminales”. Para el mandatario “los llamados ilegales son en realidad puentes para la integración”.
Medidas ante la crisis
Ante la crisis económica que se vive en Estados Unidos y Europa, el mandatario peruano informó durante su discurso que el pasado 28 de julio, en Lima, las jefas y jefes de Estado de Unasur decidieron establecer un Consejo Sudamericano de Economía y Finanzas, para actuar concertadamente y coordinar políticas de fortalecimiento de los fundamentos económicos y de supervisión de sus sistemas financieros.
“Los países latinoamericanos estamos aprendiendo a superar la vulnerabilidad crónica frente a estas crisis. América Latina no será ajena a esta tormenta que viene del Norte. Por eso estamos tomando previsiones”, sostuvo el presidente Ollanta Humala.
Levantar bloqueo a Cuba y reconocimiento a Palestina
Como parte de la integración de América Latina, el Jefe de Estado dijo que es necesario levantar el bloqueo a Cuba. “Para el gobierno peruano la integración con nuestros países vecinos es una herramienta prioritaria para promover la seguridad y el desarrollo conjunto de Sudamérica y de toda América Latina. En concordancia de lo afirmado, el camino de la paz y la reconciliación pasa por el fin del bloqueo a Cuba”, señaló.
De igual manera, se sumó al pedido para reconocer a Palestina como un Estado y reforzar así el valor de la Fraternidad como camino hacia una paz duradera. “Valga la oportunidad para sumarme desde este podio al reconocimiento del Estado Palestino y su derecho a vivir en paz y armonía con el conjunto de países de las Naciones Unidas”, manifestó el presidente Ollanta Humala.
Consejo de Seguridad Ciudadana
Asimismo, ratificó su apoyo a la ampliación del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas “para hacerlo más representativo e incrementar su legitimidad” y sostuvo que urge avanzar también en la reforma del Consejo Económico y Social “para que se convierta verdaderamente en un foro fundamental para el desarrollo de todos los pueblos del mundo”.
Finalmente, explicó que su interés por alcanzar la integración de América Latina no implica un regionalismo cerrado. “Si bien nuestra política exterior tendrá su núcleo en la hermandad sudamericana y latinoamericana, no descuidaremos nuestras relaciones políticas, comerciales y de cooperación con otras regiones del planeta. Por el contrario, nuestro regionalismo servirá de plataforma para acercarnos de manera más articulada y proactiva a otras regiones”, concluyó.