Las ONG buscan inmiscuirse en Relaciones Exteriores
Roncagliolo les abre las puertas
Resulta extraño y preocupante que el canciller Rafael Roncagliolo esté abriendo las puertas a las ONG para discutir las políticas de nuestra Cancillería, teniendo en cuenta que estas organizaciones en su mayoría son financiadas por gobiernos e instituciones extranjeras que defienden determinados intereses, no los del Perú.
Así, tenemos a ONG financiadas por Chile para buscar mejorar la imagen chilena en el Perú o para espiar a las instituciones y empresas peruanas y para infiltrarse en ellas.
Otras ONG tuvieron papeles funestos, como las financiadas por la USAID, como Manuela Ramos, organismo de fachada presuntamente defensor de la mujer, pero que avaló los programas de esterilizaciones forzadas de mujeres campesinas perpetradas por la dictadura del delincuente Alberto Fujimori, motivo que debería ser más que suficiente para que esa ONG sea considerada paria por instituciones serias y la prensa, pero siempre buscan protagonismo con el pretexto de la “defensa de la mujer”.
Roncagliolo se reunió esta semana con asociaciones civiles y Organismos No Gubernamentales (ONG) a fin de conocer sus impresiones respecto a temas de interés nacional en el ámbito internacional y se abordó temas muy sensibles para el Estado peruano como es el caso de las demandas internacionales que han planteado algunas ONG ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El colmo es que Canciller haya asegurado que la política exterior del Estado será analizada y pensada junto a estas ONG y asociaciones civiles.
"Lo que estamos tratando de hacer es tener cierto consenso sobre los grandes temas del país. Por eso invitamos a las organizaciones sociales, empresarios, sindicatos, organizaciones de mujeres y de derechos humanos para tener la oportunidad de discutir juntos estos asuntos internacionales y pensar las posiciones y estrategias del país en base a cierta concertación con los peruanos", explicó.
Roncagliolo precisó que "no es que se someterán a las organizaciones sociales las decisiones, sino que se trata más bien de formas de expresar interés por el país, lo cual debe hacerse con la participación de los interesados".
Dijo que dicha reunión "fue una oportunidad para escuchar opiniones y pensar cómo podemos desarrollar un vínculo más estable, sistemático y permanente con las organizaciones sociales" y defendió su acercamiento a las ONG señalando que las relaciones internacionales se caracterizan por la participación de los Estados, aunque "hay nuevos actores como es el caso de los empresarios, como cuando hemos tenido que negociar tratados de libre comercio".
¿Tan pobre de argumentos y formación está nuestra Cancillería que tiene que estar dando oídos y discutiendo asuntos de Estado con personajes a sueldo con fama inflada en la prensa de la cual son amiga, que callan lo que les conviene y atacan en los temas para los cuales les pagan, como son los representantes de muchas ONG? Cuidado con los mercenarios del debate.
Baste recordar que sujetos como Fernando Rospigliosi, ligado a una ONG, ostenta el apestoso antedecente de ser identificado por Wikileaks como conspirador contra Humala, además de figurar en la planilla de la embajada de los EE. UU., no se sabe si como agente de la CIA.