Los informes oficiales no concuerdan con las declaraciones de los pasajeros de la combi que fue objeto de disparos en el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (VRAEM), pues según las Fuerzas Armadas, una patrulla sufrió disparos desde el interior de una combi tras la orden de detenerse, por lo que repelieron el ataque.
Los hechos ocurrieron en la zona de Ozonampiato, en el distrito de Echarate, provincia de La Convención (Cusco), a raíz de lo cual dos de los nueve pasajeros heridos se encuentran graves.
Los pasajeros del vehículo señalan que fueron acribillados sin razón alguna, pues la combi realiza un servicio regular de transporte en esa zona.
El Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas aseguró, en un comunicado, que personal de una patrulla mixta ordenó a una combi de pasajeros detenerse, debido a que realizaba “maniobras sospechosas”. Pero en lugar de ello desde dentro de la unidad dispararon contra los efectivos, por lo que éstos repelieron el ataque.
“Como consecuencia de esta acción, resultaron heridas ocho personas, cuatro varones y cuatro mujeres, quienes fueron inmediatamente asistidos por personal de la patrulla y trasladados a la posta de salud del Centro Poblado Menor de Kiteni (…) siendo evacuados posteriormente al Hospital de Quillabamba”, informaron.
Sin embargo, los presuntos terroristas que se encontraban en la combi y dispararon contra los efectivos huyeron del lugar de los hechos, “encontrándose un fusil G-3 con el cual se habrían realizado los disparos contra las fuerzas del orden”, se lee en la nota.
El chofer de la combi, identificado como Rómulo Almirón, acusó a las fuerzas del orden de abrir fuego contra su vehículo sin motivo alguno. “Hemos pedido auxilio y nos han seguido disparando sin compasión”, contó.
Todos los ocupantes son personas conocidas en el área, por lo cual manifestaron su indignación por el trato recibido, como si fuesen terroristas.
José Astur, otro de los ocupantes de la combi, señaló que los disparos fueron realizados por los agentes de la Fuerzas Armadas y que luego del incidente los revisaron y “no encontraron ningún arma”, según informa RPP.
Otra ocupante herida, que perdió dos dedos a causa de los disparos de las fuerzas combinadas, del Ejército y la PNP, manifestó que en la combi nadie portaba armas y que nadie disparó.
Como si todo lo anterior fuese poco, a las acusaciones de las autoridades contra uno de los pasajeros de la combi atacada, de quien aseguraron tiene requisitoria por terrorismo, el fiscal de la Nación, José Peláez Bardales, desmintió tales aseveraciones.