Año de la Moralización en el Sector Educación.
Década del Liderazgo de las APAFAS, como Actores del Gran Cambio.
En la actualidad nuestro país vive el drama de ser “Últimos en Educación y Primeros en Corrupción. Las lacras de la corrup¬ción, inmoralidad, nepotismo, malversación y manipulación se han generalizado en el sector educación.
El 80% de directores de las Instituciones Educativas son corruptos, las UGELES el 90% y los Caderes el 99%. Siendo las Direcciones Regionales y el Ministerio de Educación cómplices por acep¬tar, aprobar, asesorar, defender e ignorar este maligno cáncer que viene ramificándose peligrosamente de manera vox populi sin que nadie se atreva a combatirlo, por lo que se acrecienta produciéndose un hedor nauseabundo ya que donde se pone el dedo salta la pus. Pero nosotros como ente rector de los Padres de Familia, estamento importantísimo de la comunidad educativa, queremos poner un alto a tan gravísima situación. Negándonos a ser comparsa de un drama tan singular.
Considerando que debemos tomar responsablemente una decisión: estar con la corrupción o contra ella, no hay más, sin medias tintas. Conscientes de haber tomado tal determinación hace mucho tiempo, venimos luchando en forma organizada como
Confederación, hace 9 años y aun sintiendo que estamos nadando contra la corriente, en forma quijotesca nos reconforta ir «haciendo camino» y logrando el empoderamiento de los Padres de Familia, para que puedan tomar parte activa e involucrarse en el proceso educativo de sus hijos, capacitándose para ello, a fin de hacer respetar sus deberes y derechos.
El tema del tercio superior ha desnudado en toda su incom¬petencia al ministro y al propio gobierno, quienes vienen cual magos de circo sacando de la galera medidas efectivas, me¬diáticas, populistas, dejando de lado el problema de fondo: no tenemos un proyecto educativo nacional con metas a corto, mediano y largo plazo! Un objetivo nacional en el que nos involucremos todos, dejando de lado intereses partidarios mezqui¬nos. No se trabaja con planificación; ni bien tomado el mando, el presidente García asumió como suyo el PEN del Consejo Nacional de Educación, pero no ha hecho nada por implementarlo, ni fortalecerlo, menos ejecutarlo.
Finlandia, país líder en evaluaciones PISA, le llevó 30 años de trabajo arduo, consensuado y planificado para lograr su objetivo. Mientras que aquí nos embaucan y manipulan con laptops, partidas a los colegios para infraestructura que sólo persiguen debilitarnos como APAFAS. ¿Qué se imagino el ministro? Que no había periodismo de investigación que sacaría a relucir su tercio inferior, sus denuncias penales, su triste pasado y arribismo para llegar al cargo que hoy ostenta.
Nosotros proponemos que el tercio superior sea requisito para los ministros, directores de I.E. y directores de UGELES. Es más, conocemos la realidad educativa por lo cual podemos afir¬mar que la debacle de nuestra educación se viene dando des¬de los tiempos del primer gobierno aprista que nombró a mu¬chos profesores sin más titulo que el carné. Desde entonces viene la mediocridad porque esos profesores nombrados han tenido patente de corso, para gracias a su estabilidad laboral, negarse a la capacitación. No se puede poner parches nuevos sobre telas viejas, por lo cual exigimos la renuncia del ministro por su ineptitud así como de sus vice ministros que vienen de administraciones anteriores, están contaminados con toda la lacra de la corrupción y exigimos la desactivación inmediata de las UGELES, los CADERES por ser antros de corrupción.
¡Por una innovación educativa integral y humanista, con educación formativa en valores y principios, con cultura de paz! ¡Prediquemos con el ejemplo!
