Privatización en el Perú de 1991: las falacias del fujimontesinismo sobre las empresas públicas
Mauricio Quiroz Torres(1)
PALABRAS PREVIAS
Este artículo fue escrito en 1991 y publicado originalmente en Fotocopia por la Asociación de Empleados de Paramonga y Anexos de la empresa estatal Sociedad Paramonga Limitada- luego liquidada- en el Seminario "Sindicalismo y Privatización en el marco de las reformas del Gobierno de A. Fujimori: el caso Paramonga" de 1991. Se aclaró a principios de 1992 y publicada en la Revista “Panorama del Norte Chico” que dirigía Alfonso Lozada Regis de Barranca en Mayo de 1992. En la Web fue publicada en el 2005: http://sucre.indymedia.org/es/2005/06/18813.shtml
Pese al tiempo transcurrido mantiene su vigencia sobre todo porque aún hoy los defensores a ultranza de la Privatización siguen exponiendo los mismos argumentos que combatimos y rebatimos con dureza en los primeros años de la dictadura fujimontesinista que en ese entonces tenía de socios a toda la ralea de revisionistas y oportunistas de todo pelaje comenzando por Gloria Helfer en el Ministerio de Educación, Fernando Sánchez Albavera y Carlos Amat y León en otros puestos ministeriales y hasta al conspicuo militante de Patria Roja César Barrera Bazán, como Vicepresidente del Parlamento burgués peruano.
La reproducimos nuevamente para que el movimiento obrero y popular lo utilice contra los ideológicos argumentos de los privatizadores que aún pululan en el país y afirme una posición de clase. Para el efecto hemos respetado el titulo y la estructura originaria del artículo. Sólo hemos agregado las Notas que consignamos con asteriscos.
INTRODUCCION
Antes de reducir la privatización de las Empresas Públicas Peruanas-EPP a un análisis meramente jurídico es necesario que partamos de un análisis de las causas objetivas que permiten que el régimen de Cambio 90 asuma esta posición y la implemente en un grado parcial o total en la actual coyuntura que vive el país y que se caracteriza por una crisis general del sistema y no sólo del Orden Estatal.
Con ello, decimos que nada ganaremos con reducir el problema de la privatización para el movimiento obrero y popular con el análisis del contenido de las Leyes Nº 26327, la ley que dio facultades al Poder Ejecutivo para legislar en varias materias; de los Decretos Supremos Nº 041-91-EF y 129-91-EF que regulan los procesos de redimensionamiento y reestructuración de las Empresas Públicas Peruanas o del Decreto Legislativo Nº 674-Ley de Promoción de las Inversiones Privadas en las empresas. Serían análisis largos, estériles y hasta complicados para el movimiento obrero y popular.
Nosotros necesitamos enfrentar esta situación con nuestra propia perspectiva, la perspectiva del movimiento obrero y popular. Para ello es importante el análisis de clase, vale decir, que establezcamos las determinaciones sociales, políticas y económicas que hacen que las clases dominantes y la oligarquía imperialista mundial hayan optado por la privatización en el país. Sólo ella nos va a permitir tomar las medidas mas justas en el momento actual que sirvan para resistir y dar un salto adelante en la defensa y desarrollo de los intereses de los trabajadores y el pueblo en general.
Luego, en esa medida, el análisis jurídico de las normas dictadas en torno a la privatización podrá servirnos; así como también, la forma como ésta se viene operando en varios países iberoamericanos y en el mundo en general.
Hecho esta precisión queremos pasar al punto central de la privatización.
I. LA PRIVATIZACION DE EMPRESAS PUBLICAS NO ES UN FENOMENO NACIONAL SINO MUNDIAL
A muchos trabajadores se nos mete en la cabeza que sólo porque en el país ha existido un mal Estado empresario es que debemos privatizar las empresas públicas. Nada más falso.
La privatización es un fenómeno mundial. Viene sucediendo en países iberoamericanos como Argentina, México, Uruguay, etc. Así como en otros a escala mundial: Polonia, Francia, España y recientemente en los países que formaron la ex-URSS (Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas).
Aquí en nuestro continente, Chile y Jamaica fueron los primeros en asumir la privatización.
Al no ser un fenómeno nacional sino mundial quiere decir que las verdaderas causas de la privatización radican en múltiples variables que tienen que ver con la forma como el Sistema Capitalista Mundial se desarrolla luego de la Segunda Guerra Mundial.
Pero en todo proceso, es el Fondo Monetario Internacional (FMI) quien aparece como auspiciador y son los gobiernos que siguen sus recetas económicas los que implementan esta privatización. Asimismo, junto al Fondo Monetario Internacional, el Programa de Desarrollo de las Naciones Unidas-PNUD, el Banco Mundial y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (2) recomiendan la privatización para que los países puedan acceder al financiamiento internacional de su desarrollo, es decir el crecimiento de su deuda externa, aplicando programas de ajuste estructural en las economías de los países en desarrollo.
Entonces, la privatización de las empresas públicas está asociada a los intereses usureros de la oligarquía imperialista mundial y no al desarrollo de los pueblos.
II. LA PRIVATIZACION DE LAS EMPRESAS PUBLICAS EN EL PERU NO SE JUSTIFICA EN TERMINOS MACROECONOMICOS
a. Las empresas públicas peruanas representan a 1989 menos del 5% del Producto Bruto Interno (PBI) del país (3). No hay razón, entonces, para que se les presente como grandes pulpos parasitarios en la economía peruana ni como culpables de la crisis nacional máxime si conocemos que las sociedades privadas (las empresas no públicas sin contar al sector financiero) participan en 1989 con el 86% del PBI (4). Lo cierto es que el tipo de economía que tenemos es el que no sirve y por eso tenemos que ir a su transformación.
En cambio, Chile y Jamaica según estimaciones del Banco Mundial, al momento de empezar la privatización de sus empresas públicas eran responsables por más del 20% del PBI. En la ex ? URSS y los países de Europa del Este, entre otros, las empresas públicas absorben cerca del 100% de sus PBI.
b. Los gastos de las empresas públicas peruanas como % de los gastos del Gobierno Central no representan tampoco cifras significativas: 4.3% en 1970; 6.2 en 1980 para descender a 5.4% en 1989 (5).
c. En las Inversiones Públicas son las empresas públicas las que tienen una importante participación. En los últimos años han sido el 40% de la Inversión Pública pese a participar con menos del 5% del PBI. Para el quinquenio 1991-1995 el Instituto Nacional de Planificación-INP (6) lo hace responsable de cerca del 45% de la Inversión Pública.
Hay que señalar, también, que de esta programación realizada por el INP el 70.6% será financiada con recursos del propio país pues sólo se deja el 29.4% a financiarse con recursos del exterior.
d. Es ilustrativo agregar que en cuanto a las Cuentas de Producción, las empresas públicas en 1989 aportaban en Impuesto Indirectos el 10.3% del Valor Bruto de su Producción (VBP); el 44.5% en remuneraciones y sólo recibieron el 4.5% de subsidios de su valor bruto de producción (7). Subsidios que se centraban en empresas públicas dedicadas a la fabricación de otros productos alimenticios, de harina y aceite de pescado, refinación de petróleo, producto siderúrgicos, transformación de metales no ferrosos, el comercio y a los transportes y comunicaciones.
No todas las empresas públicas peruanas entonces, reciben subsidios del gobierno central como pretenden hacer creer los partidarios de la privatización de las empresas públicas.
e. Los Resultados de las empresas públicas, si bien reflejan cifras negativas no son mas que reflejo de cómo la clase política y la tecnoburocracia lo han manejado para satisfacer los intereses de las empresas privadas que generan cerca al 90% del PBI. Así tenemos que los resultados de las empresas públicas no financieras representaron el 29% del total del sector público no financiero de 1989; y en 1990 sólo el 16.1% (8).
En cifras, las pérdidas de las empresas públicas peruanas en 1991 se redujeron a 600 millones de dólares frente a los 4 mil millones de dólares de 1990 como señala el neoliberal Carlos Boloña, actual Ministro de Economía y Finanzas del Perú (9).
Estos resultados se explican, repetimos, por la forma como la clase política y la tecnoburocracia han manejado a las empresas públicas peruanas. Hasta antes del famoso paquetazo de Agosto de 1990 y de Diciembre de 1990, que elevó considerablemente los precios y tarifas del agua, electricidad, combustibles, alimentos, etc.- los sectores mas deficitarios de las empresas públicas peruanas- con la consiguiente disminución de pérdidas en 1991.
Estos precios y tarifas de los productos de las empresas públicas peruanas se estuvieron vendiendo por debajo de sus costos para favorecer a las empresas privadas. Fue el caso de SIDERPERU que abasteció de fierro de construcción, planchas de acero, etc. A los grupos de poder de la construcción, metal mecánicos, etc; de PETROPERU que abastece de petróleo diesel y gasolina a grandes empresas industriales; o de ELECTROPERU que vende electricidad (10). Esto sin contar las exoneraciones tributarias, el subsidio del dólar MUC o tasas de interés de la banca estatal por debajo del índice inflacionario, como muy bien señala Sinesio López en un reciente trabajo (11).
Pero la reducción de las pérdidas de las empresas públicas peruanas que ocurre con el actual gobierno no se está haciendo para dinamizar o modernizar la actividad empresarial del Estado sino para deshacerse de ella, vendiéndolas en su defecto, para canjearlas por nuestra ingente deuda externa.
f. En relación a las pérdidas de las empresas públicas peruanas es necesario destacar que éste no es un fenómeno propio de las empresas públicas. Se da también en todo tipo de empresas, principalmente en las empresas privadas. Según la Comisión Nacional Supervisora de Empresas y Valores-CONASEV en 1989, de las primeras 8,000 empresas según sus resultados de operaciones, sólo 430 generan utilidades (12).
Por su parte, los analistas de la revista “½ de CAMBIO”, anotan que Textil La Unión acaba de cerrar sus operaciones y que cerrará pronto Textil San Pedro y que en general en el país ninguna empresa textil es rentable (13). Por eso reclaman que haya una “corrección real del tipo de cambio” o sea elevar el valor del dólar a S/. 1.50 y otros hasta a S/. 1.70
De igual manera, en la Agroexportación las cosas están bien mal. Por su escasa rentabilidad el Grupo Brescia acaba de cerrar Sociedad Anónima Mercantil de Lima; el Grupo COSAPI-Cilloniz tuvo que vender ALITEC S.A. (Hortalizas) al Grupo Backus para evitar mayores pérdidas. El BCP Trading (Café) se desactivó a mediados de 1991. El Grupo de Cerveceria del Sur piensa dar PROAGRO (Espárrago) a IQF del Perú así como el Grupo CARSA pretende vender INDAGRO (Espárrago y Brocóli).
También han cerrado NEISA del Grupo Mavila, AGR0PACK de los Diez Canseco, DENI (Granos y Menestras) y PROEX (Aceite), Industrial VIRU (Espárragos), etc. han reducido sus operaciones en forma considerable (14).
III. LA EFICIENCIA Y BUROCRATIZACION DE LAS EMPRESAS PUBLICAS PERUANAS NO TIENE QUE VER CON VARIABLES ECONOMICAS SINO FUNDAMENTALMENTE POLITICAS. EMPERO ES RELATIVO LA BUROCRATIZACION DE LAS EMPRESAS PUBLICAS PERUANAS.
Otro de los argumentos del neoliberalismo chicha es la ineficiencia y burocratización de las empresas públicas peruanas pero la responsabilidad no recae en las mismas empresas públicas peruanas ni en los trabajadores de dichas empresas sino en la clase política y la tecnoburocracia que han dirigido las empresas públicas peruanas aún en contra de la opinión de los trabajadores de estas empresas.
La clase política y las complacientes tecnoburocracias de las empresas públicas peruanas no sólo han permitido el acceso de personal no productivo en las empresas sino que han impedido la rapidez y agilidad de las decisiones empresariales amarrándolas mediante burocráticos reglamentos, procedimientos, para adquirir bienes y/o servicios o creando organismos burocráticos como CONADE (Corporación Nacional de Desarrollo), CONAFI (Corporación Nacional Financiera) (15), etc. para un supuesto control.
En cuanto a la burocratización de las empresas públicas peruanas, la realidad es bastante relativa. Pero en la Comunidad Económica Europea, por ejemplo, existen 9 funcionarios por cada 100 habitantes mientras que en Iberoamérica la cifra es sólo de 4.8% (16)
IV. LAS EMPRESAS PUBLICAS PERUANAS RESULTAN ESTRATEGICAS POR SUS VENTAS
EMPRESAS Estatales Como MINERO PERU COMERCIAL, PETROPERU, PESCAPERU, SIDERPERU, HIERROPERU, CENTROMIN PERU, ELECTROLIMA, ENTEL PERU, SOCIEDAD PARAMONGA LIMITADA, entre otros, se ubican en el Ranking de las primeras 500 empresas por ventas en América Latina (17).
La variedad de sus actividades así como otras características (ventas, activos) las ubica como empresas estratégicas para el Estado Peruano.
V. LOS GASTOS DEL SECTOR PUBLICO EN EL PERU SON BASTANTE INFERIORES AL DE OTROS PAISES.
Hemos señalado que la participación de las empresas públicas peruanas (16.1% en 1990) en las pérdidas del sector público no financiero son bastante reducidas. Asimismo, del PBI aportado por el sector público al país, las empresas públicas son responsables de menos del 35% de éste.
Pero en su conjunto, los gastos fiscales del país son bastante menores al de otros países. En 1985 por ejemplo, según el Banco Mundial, mientras el Estado gastaba el 12.9% del Producto Nacional Bruto otros países tenían mayores gastos que deben asombrar a los neoliberales chicha (18):
- Chile, el 35.5.%
- Venezuela, 25.6%
- México, 24.9%
- Costa Rica, 24.5%
- Ecuador, 14.5%
- Holanda, 56.6%
- Bélgica, 55.9%
- Italia, 55.3%
- Francia, 45.2%
- Estados Unidos, 24.5%
- Japón, 17.8%
Notas.-
1. Sociólogo. VicePresidente del Instituto Pueblo Continente.
2. Roger Leeds : Privatización en Jamaica. Dos Casos de Estudio. En: La Teoría de la Privatización de Empresas y el Rol del Mercado de Valores. Bolsa de Valores de Lima. Lima, Marzo de 1991.
3 y 4. Diario El Peruano. Lima, 05-12-91, páginas 14/8. En el Cuadro del Diario se puede desprender que en 1979 las empresas públicas Peruanas eran el 8.2% del PBI y en 1980 inclusive llegó a ser sólo el 2.7%.
5. Richard Webb y Graciela Fernandez Baca: Perú en Números.1991. Lima, 1991.
6. Instituto Nacional de Planificación: Plan Nacional de Desarrollo de Mediano Plazo 1991-1995. Lima, Setiembre 1991.
7. Diario El Peruano. Lima, 19-12-91. Pág. 14-B
8. Banco Central de Reserva: Nota Semanal Nº 43. Lima, Noviembre 27 de 1991.
9. Diario El Peruano. Lima, 13-02-92.Pág. A-63
10. Armando Pillado: El Capital hacia la Crisis. Desco, Lima, 1978.
11, 16 y 18. Sinesio López: El Dios Mortal. Estado, Sociedad y Política en el Perú del Siglo XX. Instituto Democracia y Socialismo.
Lima, 1991.
12 CONASEV: 500 Primeras Empresas del Perú según Ingresos. Lima, 1989.
13 y 14. Revista ½ de Cambio. Año X, Nº 229, Lima, Febrero de 1992.Págs. 2 y 7.
15. En ese año desempeñaban funciones análogas a las que hoy cumplen para las empresas públicas financieras y no financiera tanto el FONAFE y la Superintendencia de Banca y Seguros respectivamente.
17. Revista Progreso. Varios años 1980-1985. México D.F.