por Herbert Mujica Rojas

Escribió el gran Bertolt Brecht: "El peor analfabeto, es el analfabeto político. No oye, no habla, no participa de los acontecimientos políticos. No sabe que el costo de la vida, el precio del poroto, del pan, de la carne, del vestido, del zapato y de los remedios, dependen de decisiones políticas. Es tan burro que se enorgullece y ensancha el pecho diciendo que odia la política. No sabe que de su ignorancia política nace la prostituta, el niño abandonado y el peor de todos los bandidos: el político corrupto, mequetrefe y lacayo del gran capital". ¿No hay aquí quienes prefieren llamarse tecnócratas o independientes? Y, ¿a la postre, no son tres variantes de un solo lamentable?

¿Qué tan independiente es el independiente de quien sabemos a qué clubes pertenenece, para quiénes ha rubricado con firmas en pronunciamientos públicos y de qué pata cojea cuando de claudicar se trata?

¿Y esos tecnócratas cuya responsabilidad funcional es la de proveer “soluciones” para que los entreguismos parezcan virtudes democráticas y acción para el beneficio de nuestros pueblos? ¿No son esos los tecnócratas los que siempre anticipan las buenas pro, las licitaciones bajo cuerda y aseguran la cautela de sus dólares copiosos?

El compendio de esa imbecilidad con patas se llama el analfabeto político tan bien resumido por Brecht.

El independiente, el tecnócrata y el analfabeto político, forman parte de esa siniestra sinfonía perenne de que la república sufre desde que inició como tal y que ha hecho al Perú: somos lo que somos porque las castas gobernantes y pandillas delincuenciales así lo determinaron. No es el Perú casualidad o producto de la mala suerte o el infortunio.

¿Tiene rumbo Perú? El eternamente muerto canciller echó la culpa al ex presidente Toledo por el fracaso del TLC. Lo propio y con más mediocridad, hizo el primer ministro. El jefe de Estado, Alan García, ante la bestialidad inocultable de aquellos, debió enmendarles la plana con una sonora bofetada que aquietó los rebuznos. Pero no del todo. A posteriori la fanática pro-TLC, ministra de Comercio Exterior, anunció que el triunfo del candidato Correa en Ecuador, echaría vientos turbulentos sobre el comercio en la región. Y el primer ministro en arranque de rarísima lucidez ya la desautorizó públicamente. Claro, si el titular de RREE mora en su sarcófago real y sólo abandona el letargo de las sombras para firmar resoluciones que dictamina otro, igual de largo, mediocre y sectario como él. De resultas que ¡Dios los cría y ellos se juntan! De vuelta está la mafia en cancillería y tan así que nada menos que Alfonso Rivero Monsalve, el capo di tutti di capi, ha sido nombrado como embajador en el Vaticano. Y Vicente Azula se va a República Dominicana. ¿Es preciso llamar, como antes se hizo con Jorge Voto Bernales, Jorge Valdez y Eduardo Ponce, a resobados monigotes como aquellos?

El onanismo político nacional es patético: los analfabetos graznan, los independientes ladran y los tecnócratas berrean sobre señales, escenarios, re-diseños, deslindes y otras monsergas de un TLC que ¡no depende para nada! del Perú, sino del congreso norteamericano cuya mayoría demócrata hará más difíciles las cosas. Pero ¡toda la vulgaridad nacional camina por un solo aspecto, el bendito TLC con Gringolandia! ¡Qué imaginación tan brutalmente estrecha!

Dice el docto intelectual de ONG, sano y sagrado, apodíctico y ortodoxo que “es hora que se acaben los partidos”. ¡Cómo si hubiera hora y decreto para liquidar o fulminar lo que sólo el pueblo puede hacer o reivindicar de sus escombros! ¡Es tan asombroso Perú que la mediocridad pasa por análisis sociológico o exégesis de alguna especie! ¡Jóvenes a la obra, viejos a la tumba!

El analfabeto político compendia gran parte de las taras del ser común y corriente peruano. Lo simboliza malamente, lo precisa en la pobreza abominable de sus limitaciones. ¡A esos hay que atacarlos proponiendo caminos solidarios y responsables de avenida por y para el Perú!

¿Se persuadirá el lector común y corriente que sí puede ser parte de esta gran corriente renovadora y revolucionaria del país?

http://www.voltairenet.org/article161841.html