Por Ubaldo Tejada Guerrero*
El Congreso peruano, es observado como una instancia de poder muy apetecible, a la cual se presentan unos dos mil 500 candidatos cada cinco años, enfrenta la peor crisis de su historia por la falta de credibilidad entre la ciudadanía y por su escasa acción fiscalizadora frente a los otros poderes del Estado, nadie evalúa su productividad y meritocracia. ¿Y la comisión de ética?
Un sondeo de opinión de la Universidad de Lima durante agosto 2012, indicó que el Congreso es inaceptable para el 74.1 por ciento de los peruanos y que sólo un 19.8 por ciento aprueba su labor, mientras un 4.8 por ciento prefiere abstenerse de opinar por higiene mental.
Evaluando su productividad, de un total de tres mil 445 proyectos de ley que han sido presentados por los congresistas en los últimos tres años, 255 se han archivado, dos fueron anulados y sólo 822 han sido publicados, en tanto el resto fueron rechazados o retirados.
Ahora se dieron adelantado su “regalo de navidad 2012”, justificando el presidente del Congreso, Víctor Isla, que el Consejo Directivo haya acordado duplicar a 15 mil soles los gastos de representación (antes ganaban 7,617 soles) para cada legislador desde enero 2,013.
Él con un débil argumento dijo “No es una medida popular pero necesaria en aras de fortalecer la representación, consideramos que (el monto) no es excesivo, el Perú es tan grande, y lo que necesitamos es que los legisladores lleguen a todos los sitios. Esto evidentemente se debe ver en una mejora en la representación y en la comunicación sobre las necesidades de los pueblos, lo que debe sentirse con normas”.
Los congresistas peruanos ocupan en Latinoamérica el tercer lugar, como los mejores pagados en dólares con 11,859, el segundo lo ocupa Brasil con 15,006, y el primero lo ocupa Chile con 30,602; el resto de países son Colombia con 11,242, Argentina con 9,887 dólares. Los congresos que no tienen gastos de representación son Ecuador con 7,676 y Paraguay con 6,857 dólares.
Es el peor momento para hacerse un aumento en el presupuesto, acrecentando su desprestigio nacional. Ellos no tuvieron en cuenta a sectores como el magisterio, los pensionistas, jueces del Poder Judicial o las FF.AA. y P.N. Y no solo ellos, también hay otros sectores de los más de 1 millón trescientos mil trabajadores del sector público que enfrentan los mismos problemas.
Los congresistas tampoco han mirado al pueblo que sobrevive en la informalidad (62% de la PEA) con menos del sueldo mínimo. La distancia es abismal entre las remuneraciones de la mayoría de los trabajadores y las de los parlamentarios, que con toda impunidad se han realizado un aumento, aprovechándose de su “inmunidad” y “autonomía”.
El jurista Roger Vargas, con estudios en la Sorbona de París, dijo que para los políticos es muy atractivo el Congreso porque cada legislador percibe un sueldo anual equivalente a 77 mil 238 dólares ($ 6,436.5 mensual), que en soles es 16,091.25.
Los legisladores que concluyeron sus funciones de cinco años el 28 de julio del 2011, cobraron por concepto de salarios 386 mil 190 dólares, que en soles es 965,475.
Vargas señaló que los congresistas ganan en Perú 14 salarios al año (12 meses normales y dos aguinaldos, uno en julio y otro en diciembre) y quieren aumentarse a 16 pagos de cinco mil 517 dólares cada uno, con lo cual totalizarían 88 mil 272 dólares al año.
A ello podemos agregar una asignación de 30,000 soles para telefonía fija en el periodo anual de sesiones y 3,600 dólares para servicio de telefonía celular por cada año de sesiones. Pero ello no queda allí, además tienen “derecho” a cuatro pasajes aéreos al mes al destino que ello elijan y sus acompañantes reciben recursos de representación como asesores y asistentes.
Todo lo anterior le son reconocidos por Acuerdo de la Mesa Directiva y están establecidos en la cartilla de información administrativa para los despachos congresales, elaborada para el periodo 2,006-2,011 que continua vigente hasta la fecha.
Ahora ni el Congreso ni el Ejecutivo exigen ahora títulos profesionales para algunos puestos a cubrir. El pasado 24 de agosto la Mesa Directiva del Congreso de la República aprobó el Acuerdo N.° 032-2011-2012/MESA-CR que dispensó al 1% del personal del servicio parlamentario el cumplimiento del artículo 26 del Reglamento Interno de Trabajo del Congreso de la República, referido a los requisitos para ocupar cargos en el servicio parlamentario.
Podemos cerrar éste enojoso asunto, diciendo que no dan cuenta de los gastos que realizan, en qué y cuánto han gastado, lo que los convierte en servidores civiles privilegiados del sector público, porque sólo justifican con boletas o facturas, un pequeño porcentaje de ellos y la diferencia los acreditan con una declaración jurada.
El legislativo es representación popular, creación de leyes, permanente fiscalización y control político sobre los otros Poderes del Estado y orientación del desarrollo económico, político y social del país. El congreso urgente debe ser parte de la reforma del Estado.
*Analista Global
Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.