El salmón genéticamente modificado se puede cruzar con truchas y amenaza el ecosistema de las especies naturales, advierten científicos de la Universidad de Quebec, Canadá.
Los salmones fueron manipulados en sus genes para mayor rendimiento en costos, por su carne y velocidad de crecimiento, y podrían escapar a los lugares donde en forma natural vive la trucha.
La doctora Krista Oke, que condujo el estudio, sostiene que se trata del primer estudio que demuestra las consecuencias ecológicas de la hibridización entre animales genéticamente modificados y los naturales, informa la revista Proceedings of The Royal Society B.
Los lobbies en América del Norte propugnan la venta de animales genéticamente modificados para consumo humano, pero Europa prohibe su consumo.
El resultado del cruce del salmón modificado genéticamente y las truchas libres fue de un pez libre más chico de lo normal.
La estudiosa dijo que aunque los híbridos transgénicos podrían crecer en libertad, tienen ventajas competitivas frente a los naturales, por lo cual son una amenaza para las especies naturales.