"Sanlu", la leche china que mata bebés

Tras el escándalo de la leche en polvo de marca "Sanlu", que mató a cuatro bebés e intoxicó a más de seis mil en la China, el gobierno arrestó a más de 12 personas. En rueda de prensa, el ministro de Salud, Chen Zhu, informó que los afectados eran ya 6244, de los cuales 1327 siguen hospitalizados, 158 con fallo renal grave.


Los menores resultaron afectados por el melamine (un compuesto cristalino que se utiliza en la fabricación de resinas sintéticas) incorporado en la leche en polvo con fines de aumentar el volumen de la venta. Este producto es un compuesto químico prohibido para el consumo humano que da mayor consistencia a los líquidos. Como es ser rico en nitrógeno, puede engañar los detectores del nivel de proteínas.

Los niños que bebieron estos productos sufren ahora insuficiencia renal, lo que les augura un recorte en la expectativa y calidad de vida, la cual además, en el peor de los casos, provocará que tengan que depender de hemodiálisis.

Los bebés afectados son los más pobres del país, pues los chinos de mayores recursos no confían en los productos nacionales y compran leche importada.

Además de quienes adulteraron el producto, están implicados funcionarios que no reaccionaron cuando la neozelandesa Fonterra (propietaria del 45% de la empresa) reportó a sus socios chinos el hallazgo de lotes adulterados.

Dos de las 22 firmas chinas involucradas, Yashili y Suokang, exportaban sus productos a Birmania, Yemen, Bangladesh, Burundi y Gabón, según fuentes oficiales.

Las autoridades admitieron que este caso refleja el caos diario en los productos presentes en el mercado y las lagunas en la supervisión y administración. En los últimos años se han producido escándalos con muertes a causa de la mala calidad de los productos chinos.