Una vecina del distrito limeño de Surquillo llevó a su perro a una peluquería canina, 'Mi Gran Peet', de este distrito, atendida por venezolanos, donde el can sufrió una cruel muerte a golpes.

 

venezolanos mataron perro Devorador may 2023

El perrito "Devorador", cuando recién fue adoptado


Como si eso fuese poco, aparentemente los autores de la muerte sobornaron a la Policía Nacional, pues la dueña del perro denunció que la PNP alteró el texto  de la denuncia contra los presuntos responsables para protegerlos.

La señora, María Gálvez, denuncia que se trata de los encargados de una peluquería canina ubicada en Surquillo, a donde llevó a su perrito de 13 años, llamado Devorador.

Poco después de haberlo dejado en el local, los venezolanos la llamaron para decirle que “de la nada” el perrito convulsionó y murió, pero la necropsia determinó que el animal fue atacado con un objeto contundente que la causó traumatismos craneanos múltiples.


Los cobardes atacaron a la indefensa mascota aprovechando que no habla y tiene pelos que no permiten ver fácilmente las huellas de los golpes, pero no contaban con que la dueña llevaría el cuerpo de su perro para una necropsia.

El crimen  fue perpetrado el 8 mayo, donde a los diez minutos después de haber salido del local la llamaron para notificarle de la muerte.

Cuando exigió explicaciones, le dijeron que Devorador murió “de la nada”. “Me llaman y me dicen que Devorador se puso mal, que vaya de inmediato. Fui y ese pequeño camino para mi fue un infierno. Lo que ellos me dijeron es que de la nada empezó a temblar y murió”, declaró en América Noticias.

Los presuntos canicidas son los encargados del negocio, David Rafael Flores Ramirez (34) y César Enrique Pérez Hernandez (22), ambos venezolanos.

El médico veterinario forense, doctor Jhon Islachin, reveló que en Devorador “encontramos varios hematomas en la región frontoparietal (cráneo). A la conclusión que hemos llegado es que es un objeto contundente”, explicó.

Posible soborno a la PNP

María Gálvez reveló que los agentes de la comisaría de Surquillo habrían alterado el contenido de la denuncia que en un principio se redactó en el acta de intervención policial, donde también está la firma de los trabajadores de “Mi gran peet”. Ello, sospecha, podría beneficiar a los presuntos responsables de la muerte de su can.

“Me entregan esta copia certificada. Me la modificaron. Pusieron que mi perro tenía 15 años, luego pusieron que cayó al piso y pusieron que (en Devorador) 'no se aprecia signos de lesiones en el animal fallecido'. ¿cuál es la fuente de la Policía para añadir esto?”, cuestionó.

América Noticias señaló que  el caso se encuentra siendo evaluado por la Inspectoría de la Policía Nacional y con la información real de los hechos ya está en la Fiscalía. En tanto, al momento de acudir a la peluquería veterinaria, nadie quiso responder por la denuncia.