La alerta de un vecino de la ciudad de Piura permitió que especialistas del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) rescaten a una cría de caimán blanco (Caiman crocodilus), que fue abandonada en el mercado Las Capullanas, en el distrito Veintiséis de Octubre.
De acuerdo con las primeras indagaciones recogidas en el mencionado mercado piurano, un delincuene extranjero ofrecía a la venta de manera ilegal al espécimen de fauna silvestre, oriundo de la Amazonía. Este hecho alarmó a uno de los consumidores del centro de abastos que cuestionó que se trataba de un animal silvestre, cuya comercialización no autorizada está prohibida. Esto obligó al foráneo a abandonar al réptil y a huir del lugar.
La cría de Caiman crocodilus de aproximadamente cinco meses de edad y de 36 centímetros de largo fue trasladado por personal del SERFOR Piura, a las instalaciones del zoológico Cecilia Margarita para que reciba la atención médica veterinaria especializada.
Por tratarse de un reptil de corta edad, permanecerá bajo observación, en un ambiente y cuidado especial con las siguientes condiciones: agua temperada entre 22 y 26 grados centígrados, espacio abierto, zona de descanso y su alimentación será de peces pequeños, carne de pollo y enriquecida con vitaminas y minerales.
El caimán blanco llega a medir aproximadamente dos metros, y habita ríos y humedales profundos de la Amazonia peruana; y es una de las especies más afectadas por el comercio ilegal de fauna silvestre.
El SERFOR informó que la Ley Forestal y de Fauna Silvestre, Ley N.° 29763, permite el manejo de fauna silvestre en cautividad como; centros de rescate y conservación, zoocriaderos y zoológicos. Para ello, deben cumplir con los requisitos que garanticen las condiciones para el desarrollo de estas actividades.
La normativa forestal y de fauna silvestre establece multas para quienes capturen, adquieran, posean, exporten, transporten, comercialicen o aprovechen los recursos de flora o fauna silvestre, sin la debida autorización, o que provengan de centros no autorizados por el SERFOR.
El SERFOR recuerda que el comercio ilegal de fauna silvestre afecta la biodiversidad, porque cada individuo cumple una función importante en el ecosistema. En ese sentido, hace un llamado a la población a no comprar animales silvestres ni objetos (artesanías) elaborados con partes de estos de origen ilegal. También a denunciar estas actividades ilícitas. Por tanto, es delincuente quien trafica con especies protegidas.
