Solicitan mantener contratos de exportación no tradicional. “En el Perú el piso está plano. Ese régimen demuestra que funciona y ha beneficiado a las empresas y a los trabajadores”, sostuvo Amorrortu.
Ante los últimos cuestionamientos al Decreto Legislativo 22342 (Régimen de contratos de Exportación No Tradicional), los presidentes de la Asociación de Exportadores (ADEX), Eduardo Amorrortu Velayos, y de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), Luis Salazar Steiger, cerraron filas en su defensa al tiempo de considerarlo clave para la formalización del país.
Hay que recordar que un grupo de compradores extranjeros de confecciones enviaron una carta al presidente de la República, Ollanta Humala solicitando la derogatoria de ese dispositivo. De la misma manera, la semana pasada llegó al Perú Jykri Raina, secretario general de IndustriaALL Global Union, quien presentó la misma demanda.
En conferencia de prensa, que además contó con la presencia del gerente de Estudios Económicos de la ADEX, Carlos González y el jefe de estudios económicos de la SNI, Javier Dávila, los presidentes de ambos gremios pidieron al gobierno mantener ese sistema de contratación y rechazaron la pretensión extranjera de inmiscuirse en el tema. “En el Perú el piso está plano. Ese régimen demuestra que funciona y ha beneficiado a las empresas y a los trabajadores”, sostuvo Amorrortu.
Mencionó que el número de trabajadores contratados está vinculado a los pedidos de exportación que son fluctuantes en su monto, frecuencia y complejidad. Añadió que en el 2000 el Perú exportó US$ 506 millones en prendas de vestir, lo que representa 36 TM en promedio por empresa, mientras que en el 2012, se exportó por US$ 1,600 millones TM, tres veces más que en el 2000, pero la exportación promedio por empresa fue de 16 TM.
A manera de ejemplo, Amorrortu detalló que una empresa de confecciones que exportó US$ 8 millones en el segundo semestre del 2008, tenía una planilla de 2,500 trabajadores, sin embargo, en el 2009 recibió menores pedidos y se vio obligado a reducir el número a 1,250. “Distinta habría sido la historia si no hubiera existido el régimen y se habría visto obligada a mantener a todos. La consecuencia habría sido la quiebra y la pérdida de 2,500 puestos de trabajo”, refirió.
Respeto a derechos laborales
A su turno el presidente de la SNI, Luis Salazar, recalcó que los contratos de exportación No Tradicional respetan todos los derechos laborales tales como seguro social, pensión de jubilación, gratificaciones, vacaciones, pago por sobretiempos, participación en utilidades y planilla, entre otros y que la única diferencia es que no tienen estabilidad absoluta.