La proyección de Kjari Herencia Peruana era llegar a centros comerciales en tres años, pero lo lograron en 8 meses.
José Loera es un emprendedor de Comas a quien el trabajo, el estudio y ganar el primer concurso de EmpredeNorte Retail le cambiaron la vida en 360 grados. Pasó de vender 10 a 15 polos a la semana a comercializar 300 polos semanales y en temporadas puede llegar a los 500.
“Lo que planee crecer en 3 años, lo hice en 8 meses”, comenta emocionado porque al ser el ganador del concurso el año pasado, ganó un módulo gratuito de venta durante 8 meses en MegaPlaza, que según él fue el impulso que necesitó para crecer. “Sabía que Mega Plaza recibía tres millones de visitantes al mes y muchos de ellos compran nuestros productos”, señala. “Francamente tener un stand en Mega Plaza y encima gratis, fue una bendición”, afirma emocionado Loera.
Ahora tiene los medios suficientes para pagar su módulo en MegaPlaza y de abrir un stand en Gamarra.
José emigró a los 18 años los Estados Unidos y estudio en la City University of New York, CUNY, tres carreras: Ciencias Administrativas, Manejo Operacional en la Escuela de Negocios y Ciencias naturales. Además de estudiar, trabajaba.
En su universidad había reportes de la economía peruana y tras 20 años en Norteamérica decidió regresar, pero esta vez con un sueño de emprendimiento: “el sueño peruano”.
En Estados Unidos conoció a Pablo, diseñador freelance de Armani y junto a él, plasmó la creación de Kjari Herencia Peruana, tienda que fabrica prendas con estilo urbano y diseños 100% peruanos.
Con poco capital desarrollaron los diseños, pero lo hicieron con algodón de calidad. En Estados Unidos vio que prendas de famosas marcas se hacían con algodones pima o tanguis de origen peruano. José decidió apoyar a los costureros de Lima Norte quienes confeccionaban los polos y así poco a poco sueño se hizo realidad.
¿Por qué ganó Empredenorte?
El proyecto de Kjari fue el ganador del primer concurso EmprendeNorte Retail, en la categoría de Negocio Emprendedor. Sostenibilidad, innovación y ayudar a la comunidad creando trabajo fueron los factores que pesaron e hicieron ganar su propuesta.
“Ganar un stand en Mega Plaza fue una bendición, lo que proyectamos crecer en tres años lo hicimos en 8 meses con el stand gratuito de Mega Plaza. Fue un sueño hecho realidad, sabíamos que el Centro Comercial tenía a visita de tres millones de personas, pero nunca imaginamos que le gustarían tanto nuestros diseños a la gente y crecer tanto”, expresa José.
“Por eso yo les digo a los jóvenes con nuevas ideas y a los emprendedores que participen en el segundo Emprendenorte, porque a mí me cambio la vida y puedo dar fe de eso. Este año tienen plazo para inscribirse hasta el 14 de julio, también de premiará al emprendedor con un módulo gratuito, durante 8 meses en Mega Plaza y una beca en el Instituto e Emprendimiento de la Usil”, finaliza el emprendedor.