Para generar liquidez con la que poder mantener al resto de los animales, algunos han optado por sacrificar parte de su ganado.

Las consecuencias económicas del conflicto en Ucrania están haciendo que empeoren las condiciones económicas de buena parte de la población europea, debido, principalmente, al aumento de los precios de los alimentos. Una circunstancia que afecta tanto a consumidores como a productores.

 

reses Espinar Antapaccay

 

En España muchos ganaderos se están viendo obligados a cerrar sus fincas debido a las pérdidas económicas, que se han visto exacerbadas por las condiciones climáticas sin precedentes del verano que acaba de concluir, con el país bajo ola de calor durante 42 días.

Del incremento de los precios da testimonio Ángel, propietario de un supermercado local en la región del Galicia, al noroeste del país. Cuenta que en los 40 años en los que ha regentado su negocio jamás había visto una subida de precios tan importante. Pone como ejemplo la leche, cuyo precio ha subido cerca del 50 %. "Nunca en mi vida vi un incremento tan fuerte y tan continuo. Casi todas las semanas tenemos cambio de precios", relata.

Pero este alza de precios no está repercutiendo en los productores. Así, Mari Carmen ha tomado la decisión de cerrar su explotación láctea que cuenta con unas 20 vacas. "El precio de la leche es bajo, la luz está por las nubes, el gasóleo ya no digamos... Antes gastaba 600 euros en pienso y ahora 1.400. Es una situación que ahoga a uno", refiere esta ganadera.
Sacrificar ganado

Si bien el conflicto de Ucrania ha acentuado esta crisis, el problema para el sector agropecuario venía de atrás. Cada año mengua el número de granjas. En lo que va de 2022 han cerrado en España más de 800.

La crisis alimentaria que se avecina: los precios de los insumos agropecuarios se disparan en España

Para no cerrar sus negocios y hacer frente a las pérdidas que muchos ganaderos están sufriendo, algunos han optado por sacrificar parte de su ganado para generar liquidez con la que poder mantener al resto de los animales.

Ese es el caso de Marcos, cuya empresa familiar se dedica a la leche ecológica. El año pasado tenía 130 vacas, pero este año decidieron sacrificar o vender el 30 % de las cabezas para subsistir. Cuenta que la inversión para montar un negocio como el suyo ronda los dos millones de euros, "para llevarte al final de mes un sueldo de 1.000 euros a casa, trabajando todos los días del año".

José Manuel Juiz, otro ganadero, también opina que la situación es crítica y cree que si se sigue matando animales para subsistir, se podría llegar a un desabastecimiento: "Espero que no. Y de nuestra parte se va a poner todo lo posible para que así no sea. Pero es que también hay que darse cuenta que las facturas hay que pagarlas", dice.

El Gobierno anunció el pago de casi 160 millones de euros a los productores para compensar las consecuencias negativas del conflicto en Ucrania. Además, los ganaderos también reciben las subvenciones europeas. Sin embargo, el incremento de costes es de tal calibre que la situación sigue siendo realmente complicada.

 

Con información de RT