El congresista por Piura, Freddy Sarmiento Betancourt(Fuerza Popular), emplazó al gobierno a que tome la decisión política de ejecutar el tan anhelado proyecto de la nueva refinería de Talara que beneficiará a cientos de miles de pobladores de la región. En este sentido, el parlamentario denunció extrañas maniobras del Ejecutivo para dilatar la ejecución de esta obra, muy esperada y muy ansiada por la población.
El representante por la región Piura dijo que el ministro Jorge Merino, señaló en su reciente presentación en la comisión de Energía y Minas del Congreso de la República, que para la ejecución de dicha obra se requería de una ley que este poder del Estado le autorizara, trasladando extrañamente esta responsabilidad al Parlamento, cuando el Ejecutivo debería resolverlo por otras vías y con prontitud.
“Está clarísimo que el gobierno no quiere realizar la obra, faltando, una vez más, a su promesa de campaña. Esto lo tiene que conocer el pueblo. No estamos dispuestos a dejarlo pasar por alto un proyecto que es viable y que responde a las necesidades de nuestro pueblo”, afirmó el parlamentario.
Sarmiento Betancourt dijo que todos los organismos públicos y privados de su región están a la espera de que la nueva refinería de Talara sea una realidad. Así lo han expresado en pronunciamientos públicos el presidente regional, Javier Atkins Lerggios, el alcalde de Talara, Arq. Jacinto Timaná Galecio, los representantes de PetroPerú y diversas organizaciones de la sociedad civil de la región Piura.
El congresista precisó que dicho proyecto tendrá efectos directos con el desarrollo y el crecimiento de la región, así como en su impulso económico y social. “Esta obra es la más requerida en mi región, tal como lo ha señalado la población”, expresó.
Asimismo, refirió que el Ejecutivo, a través de sus instituciones competentes, debería estudiar los mecanismos más pertinentes para buscar inversiones, dentro o fuera del país, para la ejecución de la obra que es del orden de 2,700 millones de dólares, sin afectar los recursos presupuestales del Estado.
Sarmiento dijo que es urgente la decisión política del gobierno para encontrar las formas de financiamiento, puesto que su demora encarecerá la inversión proyectada inicialmente.
Recordó que los técnicos han alertado que de no llevarse a cabo esta obra y establecerse la obligatoriedad de diesel con 50 ppm en provincias, que es un combustible de mayor consumo, la refinería de Talara corre el riesgo de cerrar su operación y dedicarse a importar, complicando seriamente la estabilidad de más de dos mil trabajadores que podrían ser despedidos.
“Esta situación es muy grave. Es por eso que me dirijo al gobierno para que evite lo que podría ser una conmoción social”, exclamó el parlamentario.