Ciudad de México 18 mar (Sputnik).- México refinará todo su producción de petróleo y dejará de exportar el combustible fósil extraído, anunció este jueves el presidente Andrés Manuel López Obrador, en un discurso en el estado de Tabasco (sureste), donde conmemoró los 83 años de la nacionalización petrolera, emprendida por el entonces presidente general Lázaro Cárdenas (1934-1940).
"La extracción de petróleo se destinará a la refinación y no continuará la tendencia a exportar crudo y comprar gasolina (en el extranjero), es decir, toda la materia prima será procesada en nuestro país", expresó el mandatario al leer un discurso con 10 puntos que resumen su estrategia nacionalista para alcanzar la soberanía energética.
El gobernante comenzó por ratificar su compromiso de "frenar la privatización del sector energético", al reiterar que "el único dueño del petróleo es el pueblo de México".
Sin embargo, dijo que, aunque no su administración no otorgará nuevas concesiones para la explotación de hidrocarburos, respetará los contratos firmados por el Estado mexicano con petroleras de todo el mundo, entre 2015 y 2017, después de que una reforma constitucional abolió en 2013 el monopolio estatal en la industria petrolera, para abrir el sector a la competencia y a la inversión extranjera y privada.
"Se respetarán los contratos otorgados de la llamada Reforma Energética, pero no entregarán nuevas concesiones para la explotación de petróleo y se protegerá a Pemex para mantener su participación actual en el mercado de las gasolinas, el diesel y otros derivados del petróleo", expresó el jefe de Estado.
López Obrador se comprometió a cumplir la meta de producir en México las gasolinas que el país consume, para dejar de importar hasta el 80 por ciento de productos refinados y gas natural, sobre todo desde EE. UU.
"Dejaremos de importar combustibles del extranjero, con este propósito se continuará destinando recursos para la modernización de seis refinerías existentes" además de la reconstrucción de una planta productora de coque en Tula, Hidalgo (centro), y de terminará a mediados del año próximo 2021 la nueva refinería de Dos Bocas, en las costas del Golfo de México que costará más de 8.000 millones de dólares.
El gobernante reafirmó su decisión de avanzar hacia el fin de las exportaciones de crudo, a pesar de tres grandes hallazgos de "campos petroleros gigantes" logrados en su administración que comenzó en diciembre de 2018, como el anunciado este jueves en el pozo Dzimpona 1, en un yacimiento terrestre en el estado de Tabasco (sureste), con hasta 600 millones de barriles de crudo equivalente (aceite y gas) estimados. (
NUEVA META DE PRODUCCIÓN A LA BAJA
López Obrador corrigió su propia meta de elevar la producción de los actuales 1,7 millones de barriles diarios a 2,4 millones al día en 2024, su último año en la presidencia.
"En términos cuantitativos, durante todo nuestro mandato no sacaremos del subsuelo más de dos millones de barriles diarios, extraeremos aproximadamente la mitad que explotó en todo el sexenio de Vicente Fox", quien fue presidente de 2000 a 2006.
También se comprometió a reponer el 100 por ciento de la reservas petroleras probadas que se vayan extrayendo en los próximos cuatro años.
El propósito de esa estrategia es "evitar el uso excesivo de combustibles fósiles y actuar de manera responsable, sin afectar la herencia de nuevas generaciones".
En contraste, la petrolera estatal destinará más presupuesto a exploración y explotación de gas natural, que México importa de EEUU para su consumo interno.
Finalmente dijo que seguirá reduciendo los impuestos a Pemex para garantizar la inversión y mantenimiento de sus instalaciones.
En cambio, ratificó su compromiso de "no aumentar en términos reales los precios de las gasolinas el diesel y los combustibles".
Es decir, que los precios de los combustibles no aumenten más de la inflación, a pesar de que su promesa de campaña fue bajar los precios.
Finalmente, prometió terminar de limpiar de corrupción en Pemex, sin despedir trabajadores, respetando sus condiciones laborales y salariales.
"Nunca más casos como Odebrecht", constructora brasileña que pagó millonarios sobornos para la campaña electoral por la presidencia a Enrique Peña Nieto (2012-2018) a cambio de contratos con Pemex cuando llegó al poder. (Sputnik)