La Comisión de Asignaciones de la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó este jueves en una enmienda que impediría al presidente Joe Biden renunciar a las sanciones contra el gasoducto Nord Stream 2 en el año fiscal 2022.
 
 

nord stream 2

 

 
"(Esta enmienda tiene como objetivo) restaurar la seguridad energética en Europa central y oriental, incluida Ucrania (…) Esta enmienda derogaría la exención de las sanciones contra el Nord Stream 2 en el año fiscal 2022", dijo la congresista Marcy Kaptur, que acompañó la medida.
 
La legisladora calificó al gasoducto como "un arma política para socavar" la seguridad energética de Europa.
 
Durante el Gobierno de Donald Trump (2017-2021), Estados Unidos impuso varias rondas de sanciones a Nord Stream 2 AG, el operador del proyecto con sede en Suiza, y a varias empresas que trabajaron en la construcción del gasoducto.
 
En mayo, la administración de Joe Biden anunció que levantaría las sanciones contra el operador del gasoducto, así como contra su director ejecutivo, Matthias Warnig, como parte de los esfuerzos para reparar el daño causado a las relaciones entre Estados Unidos Europa mientras Trump estaba en el cargo.
 
Recientemente, el secretario de Estado Antony Blinken admitió en una entrevista con Der Spiegel que Washington se decantó por suspender las sanciones contra la empresa operadora del proyecto Nord Stream 2 porque el gasoducto ya estaba casi finalizado.
 
Blinken añadió que Estados Unidos discute con Alemania "las posibles medidas para evitar que el gasoducto se convierta en un instrumento de presión y garantizar los intereses de Ucrania, tanto económicos como estratégicos".
 
"Hemos suspendido las sanciones, pero es una decisión reversible. Dentro de un mes, aproximadamente, debemos presentar un nuevo informe al Congreso. Espero que nuestras negociaciones sean fructíferas", dijo.
 
El Nord Stream 2 tiene por objetivo la puesta en marcha de un gasoducto que transportaría hasta 55.000 millones de metros cúbicos de gas natural por año desde Rusia a Alemania.
 
Se oponen al nuevo gasoducto, cuya construcción está a punto de finalizar, Estados Unidos, que busca vender a Europa el gas natural licuado de sus yacimientos de esquisto; Ucrania, que perdería su condición de país de tránsito; y varias naciones europeas como Polonia, Letonia y Lituania.
 
Rusia instó reiteradamente a no politizar este proyecto comercial, que será beneficioso tanto para ella como para la Unión Europea. 
 
 
Con información de Sputnik