EE. UU.: Marchas en más de 70 ciudades contra ley de inmigración
Nutridas marchas contra la ley antiinmigración de Arizona se realizaron en más de 70 ciudades de los Estados Unidos, en las que participaron alrededor de un millón de personas.
La ley promulgada por el estado de Arizona, que tipifica como delito la inmigración ilegal, sin la documentación pertinente, y que además permite la detención de los sospechosos de incurrir en este delito, también considera delito ofrecer transporte o trabajo a un inmigrante ilegal; y mereció el rechazo de muchos sectores, entre ellos del presidente Barack Hussein Obama, quien advirtió que esta norma podría permitir la violación de los derechos humanos.
Nutridas marchas contra la ley antiinmigración de Arizona se realizaron en más de 70 ciudades de los Estados Unidos, en las que participaron alrededor de un millón de personas.
La ley promulgada por el estado de Arizona, que tipifica como delito la inmigración ilegal, sin la documentación pertinente, y que además permite la detención de los sospechosos de incurrir en este delito, también considera delito ofrecer transporte o trabajo a un inmigrante ilegal; y mereció el rechazo de muchos sectores, entre ellos del presidente Barack Hussein Obama, quien advirtió que esta norma podría permitir la violación de los derechos humanos.
Los manifestantes reclaman el derecho de los inmigrantes ilegales a permanecer en el país en condiciones dignas y el hecho de ser perseguidos incluso siendo legales, pues por el aspecto mestizo en cualquier momento podrían considerarlos sospechosos.
En las manifestaciones había carteles contra la ley algunos de los cuales recordaban que los primeros inmigrantes no traían papeles, con lo cual hacían alusión a la inmigración de europeos, que se estableció en territorios de los indígenas.
Por otro lado, una de las justificaciones para haber promulgado la ley en Arizona es el índice de criminalidad, pues desde la frontera con México llega la droga y la delincuencia. No obstante, el gobierno estadounidense no hace nada por combatir el tráfico dentro de su territorio, el cual aumenta, pese a las innovaciones tecnológicas, lo cual sería un indicio del alto grado de corrupción en las autoridades.
Es este consumo estadounidense el que atiza el tráfico de estupefacientes y el fortalecimiento de las bandas criminales.
Otro problema serio es la pobreza en el campo mexicano tras la firma del TLC con los EE. UU, después de lo cual la introducción de productos agropecuarios subsidiados hizo quebrar a muchos productores, lo que trajo una gran pérdida de empleos en el agro. Estos mexicanos huyen del agro, donde no pueden sostenerse, para tratar de encontrar trabajo en las ciudades mexicanas, el cual también es difícil, por lo que la opción de cruzar la frontera del país vecino o incursionar en el tráfico de drogas gana cada vez más seguidores.
Tras la reciente ley, la fecha más oportuna fue el Día del Trabajo, por su cercanía y significado de la oportunidad de empleo, y porque es un día en que se puede contar con más manifestantes, por ser día no laborable, por ello fue escogida por la Red de Solidaridad Nacional con los Inmigrantes, que convocó las marchas.
La población de inmigrantes de América Latina se estima en unos 50 millones, con lo cual superaron a los negros en ser la primera minoría. No obstante, existe xenofobia contra ellos.
Un hecho que disparó el miedo contra los mexicanos fue el asesinato en marzo de un ranchero, quien fue víctima de narcotraficantes, lo cual indujo a los electores a votar por esta ley, pese a que el número de delitos se redujo en un 23%.
En territorio estadounidense hay unos 12 millones de inmigrantes ilegales, de los cuales más de la mitad son mexicanos y cerca de un millón y medio centroamericanos.
En las manifestaciones había carteles contra la ley algunos de los cuales recordaban que los primeros inmigrantes no traían papeles, con lo cual hacían alusión a la inmigración de europeos, que se estableció en territorios de los indígenas.
Por otro lado, una de las justificaciones para haber promulgado la ley en Arizona es el índice de criminalidad, pues desde la frontera con México llega la droga y la delincuencia. No obstante, el gobierno estadounidense no hace nada por combatir el tráfico dentro de su territorio, el cual aumenta, pese a las innovaciones tecnológicas, lo cual sería un indicio del alto grado de corrupción en las autoridades.
Es este consumo estadounidense el que atiza el tráfico de estupefacientes y el fortalecimiento de las bandas criminales.
Otro problema serio es la pobreza en el campo mexicano tras la firma del TLC con los EE. UU, después de lo cual la introducción de productos agropecuarios subsidiados hizo quebrar a muchos productores, lo que trajo una gran pérdida de empleos en el agro. Estos mexicanos huyen del agro, donde no pueden sostenerse, para tratar de encontrar trabajo en las ciudades mexicanas, el cual también es difícil, por lo que la opción de cruzar la frontera del país vecino o incursionar en el tráfico de drogas gana cada vez más seguidores.
Tras la reciente ley, la fecha más oportuna fue el Día del Trabajo, por su cercanía y significado de la oportunidad de empleo, y porque es un día en que se puede contar con más manifestantes, por ser día no laborable, por ello fue escogida por la Red de Solidaridad Nacional con los Inmigrantes, que convocó las marchas.
La población de inmigrantes de América Latina se estima en unos 50 millones, con lo cual superaron a los negros en ser la primera minoría. No obstante, existe xenofobia contra ellos.
Un hecho que disparó el miedo contra los mexicanos fue el asesinato en marzo de un ranchero, quien fue víctima de narcotraficantes, lo cual indujo a los electores a votar por esta ley, pese a que el número de delitos se redujo en un 23%.
En territorio estadounidense hay unos 12 millones de inmigrantes ilegales, de los cuales más de la mitad son mexicanos y cerca de un millón y medio centroamericanos.