Lo confirmó la Policía local. Esta mañana, un hombre disparó contra los fieles que asisitían a un oficio de la religión sij en Oak Creek, en el Estado de Wisconsin. También hay al menos cuatro heridos. Ocurre a dos semanas de la masacre en un cine de Denver, donde mataron a 12 personas.
Lo que debía ser un pacífico oficio religioso de los sij de Wisconsin terminó en un baño de sangre. Esta mañana, después de las 10 am, un hombre blanco, corpulento, entró en el edificio de un templo de la localidad de Oak Creek (Milwaukee) y armado con dos revólveres disparó a mansalva. Siete personas, incluido el tirador, terminaron muertas y Estados Unidos revivió el horror de hace dos semanas, cuando un joven masacró a 12 espectadores e hirió a más de 50 en un cine de Aurora (Denver) a unos 1700 kilómetros de allí.
Este nuevo tiroteo sacude a Estados Unidos que no sale de su asombro y del horror. El sol y el cielo despejado hacían pensar en un domingo para disfrutar en Oak Creek, una tranquila localidad de poco más de 30 mil habitantes, pero la violencia los golpeó. Habían pasado pocos minutos de las 10 de la mañana cuando un hombre blanco, de unos 30 años y contextura corpulenta entró en el “Templo sij de Wisconsin”, sobre la calle South Howell y disparó contra los 50 fieles que se calcula estaban allí. Mató a cuatro personas e hirió a otras tres. En el exterior del edificio asesinó a dos personas e hirió a un policía, el primero que llegó a la escena del crimen. Allí, en la calle también murió el atacante. Llevaba un chaleco y dos pistolas, informaron medios locales.
En total, la masacre de hoy deja siete muertos, incluido el tirador, confirmó la Policía local. Y cuatro personas baleadas, sumado el oficial, un veterano con más de 20 de experiencia, que le hizo frente al atacante al llegar al lugar luego de que las autoridades de Oak Creek, en el condado de Milwaukee, recibieran un pedido de auxilio al 911.
Medios locales informaron que el Hospital Froedtert de la zona confirmó que tres hombres heridos fueron trasladados a ese centro asistencial, uno de ellos se encuentra en condición crítica en la unidad de terapia intensiva y otro está siendo operado. Se desconoce aún el estado del tercero. El policía que resistió contra el atacante también tuvo que ser intervenido, pero al parecer está fuera de peligro.
Uno de los miembros de la comunidad sij de Oak Creek, Ven Boba Ri, informó que los fieles no paraban de mandar mensajes pidiendo auxilio y describieron al tirador como a un hombre blanco, de unos 30 años y de contextura corpulenta.
Apenas se recibió el alerta, varios equipos policiales se dirigieron a la zona y la acordonaron para dejar al templo sij (una religión de la India) aislada de los curiosos.
En el lugar trabajó un equipo SWAT, otro de la Policía del Condado de Milwaukee y uno del FBI, quienes lograron “derribar” al atacante.
Este incidente conmociona a esta localidad de Estados Unidos que todavía no sale de su asombro por la masacre en un cine de Denver, cuando James Holmes, de 24 años, ingresó en una sala del complejo y disparó a mansalva contra los espectadores, matando a 12 personas e hiriendo a 58 durante el estreno de la última película de Batman el 20 de julio pasado.
Esta no es la primera vez que Oak Creek sufre un tiroteo así. En 2005, un hombre llamado Terry Ratzmann disparó y mató a siete personas y luego se suicidó durante una reunión religiosa en un hotel.
Clarín, 05-08-2012