Raúl Wiener
En la radio que se jacta ser una “señal de futuro”, tenemos Venezuela hasta en la sopa. Y como puede suponerse, el programa diario de entrevistas, Ampliación de Noticias, está cargado de invitados que representan a distintas expresiones de la oposición de ese país y a políticos criollos que también se han afiliado a la “democracia” que viene reclamando el inmediato “cambio del régimen” que ganó las elecciones hace menos de un año. Don Raúl Vargas, por supuesto, nos recuerda que en sus estudios también ha estado el embajador para brindar la versión de su gobierno, que el viejo periodista define amablemente como errada y distorsionada, pero que es una opinión que también debe escucharse. Una opinión así de desvalorizada, entre una cantaleta de 24 horas. ¿En qué otro caso, la versión de algún otro gobierno guarda una proporción equivalente con la de sus opositores?
Pero no es solo el caso de RPP. Viendo a la prensa concentrada y buena parte de la que dice oponerse a la concentración, se comprueba que tienen la misma posición sobre Venezuela, con lo que debemos haber alcanzado una cobertura muy próxima al 100% a favor de Leopoldo López y sus muchachos, con muy pocas excepciones. Y eso ocurre en un país en el que se decía que había poco más de 30% de electores que no le hacían ascos a un candidato “chavista” como parecía el Ollanta radical, y 51% al que le bastó la hoja de ruta, que en nada se compromete respecto a preferencias internacionales. Bueno, entonces, ¿por qué no hay más puntos de vista en el debate y una información más diversificada? ¿O es que en el Perú todos miramos por el mismo lente?
Por ahí hemos visto que se ha titulado que a Humala otra vez se le ha salido su chavismo por no condenar como lo hace por ejemplo el gobierno de Estados Unidos a su similar de Caracas y limitar sus declaraciones a deplorar la violencia e invocar a las partes a un entendimiento. Pero, ¿qué quiere decir todo eso?, ¿que no se puede pensar diferente sobre un tema caliente como Venezuela?, ¿acaso que el Perú debería estar pidiendo intervención externa como ya lo ha hecho el excandidato republicano John McCain’?, ¿que no son las víctimas de la violencia sino el control del gobierno lo que realmente interesa?, ¿o quizás que en el Perú hemos elegido en algún momento la posición que expresan El Comercio, Correo o La República, en política internacional?
Ya hemos visto campañas como la de estos días como preparación de las intervenciones en Irak, Afganistán, Libia, y otras. Y ya tenemos una larga serie de operaciones “democráticas” de las derechas latinoamericanas con apoyo de Washington en nuestros países. El problema es que la memoria de mucha gente es corta como para detectar lo que se está fraguando.
La Primera, 21.02.2014